Contexto

La lección continúa con el matrimonio de Isaac y Rebeca. Aquí, el pasaje se centra en los últimos días de Abraham y la descendencia de sus dos hijos, Ismael e Isaac. De estas narraciones, aprenderemos más sobre cómo la progresión de la promesa del Señor comienza a tener lugar y a cumplirse en los descendientes de Isaac.

Versículo clave

(25:23)

¿Sabía usted que...?

1. “Abraham tomó otra mujer” (25:1): en hebreo, la oración se puede traducir literalmente como “Abraham añadió y tomó una esposa”.
2. Cetura (25:1): en hebreo, la ortografía del nombre Cetura es casi similar a la palabra “incienso o dulce humo de sacrificio”.
3. Zimran (25:2) puede identificarse con Zabram, al oeste de La Meca en el Mar Rojo o Zimareni en el interior de Arabia. ^[ref]
4. Jocsán (25:2) es Kassamitoe en el Mar Rojo o la tribu Jakish del sur de Arabia. ^[ref]
5. Medán y Madián (25:2) son conocidas como Modiana al este del golfo Elamítico y Madiana al norte del golfo Elamítico. ^[ref]
6. Súa (25:2) puede apuntar al norte de Idumea. ^[ref]
7. Asurim (25:3) se ha asociado con la tribu guerrera de Asir, al sur de Hejas. ^[ref]
8. Letusim (25:3) está asociado con Bann Leits en Hejas. ^[ref]
9. Leumim (25:3) está asociado con el Bann Lâm, que se extendía hasta Babilonia y Mesopotamia. ^[ref]
10. Hanoc (25:4) puede referirse a Hanakye, tres días al norte de Medinah. ^[ref]
11. Abida y Elda (25:4) se han referido a las tribus de Abide y Vadaa en la vecindad de Asir. ^[ref]
12. “Lleno de años” (25:8): en hebreo, también puede traducirse literalmente como “saciado de días”.
13. Nebaiot (25:13) se identifica con los nabateos, un pueblo del norte de Arabia que poseía abundantes rebaños (Is 60:7). ^[ref]
14. Cedar (25:13) se ha asociado con el pueblo que habita entre Arabia Pétrea y Babilonia. ^[ref]
15. Misma (25:14) está conectado con Maisaimeneis en el noreste de Medina. ^[ref]
16. Duma (25:14) es similar a la Duma siria en Arabia, al borde del desierto sirio. ^[ref]
17. Massa (25:14) se asocia con los Massanoi del noreste de Duma. ^[ref]
18. Hadar (25:15) se identifica con una tribu en Yemen, entre Omán y Bahrein. ^[ref]
19. Tema (25:15) se ha conectado con la tribu Bann Teim en Hamasa en el Golfo Pérsico. ^[ref]
20. “Murió en presencia de todos sus hermanos” (25:18): en hebreo, la frase se puede traducir literalmente como “él se asentó en presencia de todos sus hermanos”.
21. “Los hijos luchaban dentro de ella” (25:22): en hebreo, esta frase se puede traducir literalmente como “los hijos se aplastaban unos a otros en su vientre”.
22. Esaú (25:25): en hebreo, la redacción del nombre es similar a la palabra “cabello”.
23. Hombre tranquilo (25:27): en hebreo, esta frase se puede traducir literalmente como “varón quieto”.
24. “Te ruego que me des a comer de ese guiso rojo” (25:30): en hebreo, la frase de Esaú se puede traducir literalmente como “Déjame tragar de la rojez de estas lentejas rojas”.
25. Primogenitura (25:31): en hebreo, puede traducirse literalmente como el derecho del primogénito. En otras palabras, el primogénito recibirá automáticamente la primogenitura (Gn 43:33). Según las Escrituras, el hijo primogénito simboliza la excelencia de la dignidad y la excelencia del poder del padre (Gn 49:3). Además, el libro de Deuteronomio explica que el primogénito tiene derecho a recibir el doble de la herencia del padre (Dt 21:17).

Esquema

• Abraham en su vejez
  (25:1-11)
• Los descendientes de Ismael
  (25:12-18)
• Los descendientes de Isaac
  (25:19-28)
• Esaú vende su primogenitura
  (25:29-34)

Palabras/frases claves

Abraham tomó otra mujer, diestro en la caza, dos pueblos divididos, el mayor servirá al menor, enviándolos hacia las tierras del oriente, hombre tranquilo, los separó de su hijo Isaac, menospreció, murió en buena vejez, oró a Jehová, primogenitura, véndeme

Análisis general

Análisis del segmento

• 25:1-11

  1.	¿Quiénes fueron los otros hijos de Abraham?         Mostrar respuesta Además de Ismael e Isaac, Abraham también tuvo hijos de su otra mujer, Cetura. Los hijos fueron Zimran, Jocsán, Medán, Madián, Isbac y Súa (Gn 25:1). Ocultar respuesta

• 2.

  ¿Cómo trató Abraham a sus otros hijos en comparación con Isaac? ¿Por qué Abraham los trató diferente?         Mostrar respuesta Mientras que Abraham dio todo lo que tenía a Isaac, Abraham solo dio regalos a los hijos de las concubinas que tenía. Además, Isaac se quedó junto con Abraham mientras que los otros hijos fueron enviados por Abraham hacia el este, a las tierras del oriente, lejos de Isaac (Gn 25:5-6). Lo que Abraham hizo aquí fue similar a lo que hizo con Agar e Ismael en Génesis 21. Él envió a Ismael y a los otros hijos de las concubinas lejos de Isaac porque el Señor le había dicho específicamente a Abraham que en Isaac le sería llamada descendencia (Gn 21:12). Además, el Señor ya le había enfatizado a Abraham que Él establecería su pacto solo con Isaac, el que Sara daría a luz (Gn 17:21). En otras palabras, la decisión de Abraham de despedir a todos los demás hijos de las concubinas se basó en la promesa de Dios de que el pacto perpetuo de Dios solo se establecería con Isaac, y no con los hijos de las concubinas. Ocultar respuesta

• 3a.

  ¿Cómo describen las Escrituras la muerte de Abraham?         Mostrar respuesta Las Escrituras describen la muerte de Abraham como alguien que vivió ciento setenta y cinco años. Luego exhaló el espíritu y murió en buena vejez. Era anciano y lleno de años, y fue reunido a su pueblo (Gn 25:7-8). Ocultar respuesta

• 3b.	Comparta una experiencia de alguien en la iglesia que haya muerto en “buena vejez y lleno de años”.         Mostrar respuesta (La respuesta está vacía) Ocultar respuesta

• 4a.

  ¿Cómo la declaración en Heb 11:13 concuerda con el evento en Gn 25:9-10?         Mostrar respuesta Gn 25:9-10 nos dice que Abraham fue sepultado en la cueva de Macpela, la heredad que había comprado de los hijos de Het. La cueva era solo un pedazo de tierra adquirido por Abraham entre la vasta tierra de Canaán. Aunque el Señor le había prometido a Abraham mediante un pacto que lo sacaría de Ur de los caldeos para darle a heredar la tierra de Canaán (Gn 15:7s), al final, Abraham, en su vida nómada, se quedó como peregrino en la tierra de Canaán. La declaración en Heb 11:13 concuerda con el evento de Gn 25:9-10. Abraham al final murió sin haber recibido la tierra de Canaán. Solo compró un lugar de entierro. Pero el autor de Hebreos explicó más detalladamente que Abraham murió en la fe. Aunque no recibió lo prometido, vio las promesas de lejos, las creyó y las saludó. Ocultar respuesta

• 4b.

  Hoy, ¿qué lección podemos aprender de Abraham que murió sin haber recibido sus promesas?         Mostrar respuesta De la muerte de Abraham y de no haber recibido las promesas de Dios, podemos aprender acerca de su fe. Aunque en su vida Abraham solo habitó en la tierra prometida como un extranjero y no heredó la tierra, vio las promesas de lejos, las creyó y las saludó. Hoy, en nuestro camino espiritual, creer y saludar la promesa que no hemos recibido, no hemos visto ni experimentado, es un desafío de fe. Así como Abraham vio las promesas de Dios de lejos, las creyó y las saludó, nosotros también debemos saludar y creer que Dios nunca se olvidará de las promesas que nos hizo. Ocultar respuesta

• 5.

  ¿Cómo es que la frase “Dios bendijo a Isaac” en Gn 25:11 sigue siendo relevante para nosotros hoy? Véase también Ro 4:16 y Gl 4:23s, 5:1, 22.         Mostrar respuesta Gn 25:11 dice: “Después de muerto Abraham, Dios bendijo a Isaac, su hijo”. Aquí, la oración indica que Dios bendijo a su hijo Isaac aunque Abraham había muerto. La bendición fue de hecho el cumplimiento de la promesa de Dios a Abraham. En Gn 22:18, el Señor le dijo a Abraham que en su simiente serían benditas todas las naciones de la tierra. Según el libro de Romanos, la promesa de las bendiciones de Dios es cierta para toda descendencia, no solamente para la que es por la Ley, sino también para la que es de la fe de Abraham (Ro 4:16). Por lo tanto, la bendición de Dios a Isaac también es relevante para nosotros hoy. El apóstol Pablo, en su carta a los Gálatas, explica más detalladamente la bendición de Isaac, que los que nacen de la promesa de Dios son considerados libres (Gl 4:23, 26, 28, 31). La bendición prometida que disfrutamos hoy como descendientes de una mujer libre, es poder vivir libremente en Cristo, caminando en el Espíritu y llevando el fruto del Espíritu en nuestras vidas (Gl 5:1, 22). Ocultar respuesta

• 25:12-18

  6.	Anote los nombres de los hijos de Ismael.         Mostrar respuesta Los nombres de los hijos de Ismael son Nebaiot, Cedar, Adbeel, Mibsam, Misma, Duma, Massa, Hadar, Tema, Jetur, Nafis y Cedema (Gn 25:13-15). Ocultar respuesta

• 7.

  Haga una lista de los logros de Ismael y sus descendientes. Compare los logros con la bendición prometida de Dios en Gn 17:20.         Mostrar respuesta Los logros de Ismael fueron el establecimiento de villas y campamentos según las naciones de los doce príncipes, los hijos de Ismael. La región de su territorio se extendía desde Havila hasta Shur, que estaba al este de Egipto (Gn 25:16, 18). Los logros de Ismael y sus descendientes concordaban con la bendición de Dios en Gn 17:20. El Señor prometió a Abraham que bendeciría a Ismael para que engendrara doce príncipes y haría de él una gran nación. Posteriormente, la bendición se cumplió mediante el establecimiento de villas y campamentos de las naciones de los doce príncipes de Ismael. Ocultar respuesta

• 8.	¿Qué edad tenía Ismael y cómo terminó su vida?         Mostrar respuesta Los años de la vida de Ismael fueron ciento treinta y siete años. Ismael exhaló el espíritu, murió y fue reunido a su pueblo. Murió en presencia de todos sus hermanos (Gn 25:17-18). Ocultar respuesta

• 9.

  ¿Qué ironía vemos en la frase “murió en presencia de todos sus hermanos”? Véase también Gn 16:12.         Mostrar respuesta En la Traducción Literal de Young, la frase se traduce como “en presencia de todos sus hermanos ha caído”. La traducción alternativa de la NKJV aparece como “cayó en presencia de todos sus hermanos”. Tal énfasis nos muestra la ironía de que en todos sus logros y éxitos, Ismael cayó y murió en presencia de todo su pueblo. Además, la frase en hebreo también se puede traducir literalmente como “se instaló frente a o contra todos sus hermanos”. Tal traducción es similar a la profecía del Señor en Gn 16:12. La NVI dice: “Y vivirá en conflicto con todos sus hermanos”. Aunque Ismael en su vida logró establecer villas y campamentos según las naciones de sus doce príncipes, fue una ironía que su vida estuvo siempre en conflicto con todos sus hermanos. Ocultar respuesta

• 25:19-28

  10a.

  Compare la reacción de Isaac y Rebeca ante su esterilidad con la de Jacob y Raquel.         Mostrar respuesta Al saber que Rebeca, su mujer, era estéril, Isaac oró al Señor por su mujer (Gn 25:21). Después que Rebeca concibió, ella también fue a consultar al Señor cuando los hijos luchaban dentro de ella (Gn 25:22). Pero Jacob y Raquel tuvieron una reacción diferente al enfrentar su esterilidad. Raquel, al ver que no daba hijos a Jacob, tuvo envidia de su hermana Lea. También amenazó a Jacob diciendo que moriría a menos que él le diera hijos (Gn 30:1). Ante la amenaza de Raquel, Jacob, en lugar de invitar a su mujer a orar al Señor, se enojó y la reprendió (Gn 30:2). Ocultar respuesta

• 10b.

  ¿Qué podemos aprender de las diferentes reacciones entre Isaac – Rebeca y Jacob – Raquel ante su esterilidad?         Mostrar respuesta En las dificultades, tanto Isaac como Rebeca no se murmuraron ni se quejaron contra Dios ni entre ellos. Cuando se enfrentaron ante la esterilidad y los problemas con los fetos en el útero, Isaac y Rebeca ambos oraron y le pidieron al Señor su guía. En cambio, cuando Jacob y Raquel se enfrentaron ante la esterilidad, se culparon entre ellos, se quejaron el uno del otro y no buscaron la guía y la ayuda de Dios. Los ejemplos de Isaac – Rebeca y Jacob – Raquel nos enseñan la actitud adecuada para enfrentar los desafíos y las dificultades de la vida. A veces, tendemos a reaccionar basados en la presión y la emoción, culpando a los demás con fuerte ira. Pero a través del ejemplo de Isaac y Rebeca, se nos recuerda que ante los desafíos debemos confiar en la guía y en la ayuda de Dios. Ocultar respuesta

• 10c.	Comparta testimonios de cónyuges que confiaron en el Señor frente a su esterilidad.         Mostrar respuesta (La respuesta está vacía) Ocultar respuesta

• 11a.

  ¿Cuál es el significado de las frases que el Señor respondió a Rebeca en Gn 25:23? “Dos naciones hay en tu seno”;         Mostrar respuesta “Las dos naciones” implica el proceso de cumplimiento de la promesa de Dios al padre de Isaac, Abraham. En Gn 17:4-6, Dios le había prometido a Abraham que sería padre de muchas naciones. Así, los mellizos en el vientre de Rebeca serían los progenitores del cumplimiento de esa promesa. Ocultar respuesta

• 11b.

  “Dos pueblos divididos desde tus entrañas”;         Mostrar respuesta La separación indica la división de los dos hijos y sus descendientes. La separación se realizó más tarde en Gn 36:6s cuando Esaú se llevó a sus familias de Canaán a otra tierra, separándose de su hermano Jacob, y habitó en los montes de Seir, Edom. Gn 36:7 explica que tuvieron que separarse debido a que los bienes de Jacob y Esaú eran tantos que no podían habitar juntos. Ocultar respuesta

• 11c.

  “Un pueblo será más fuerte que el otro pueblo”;         Mostrar respuesta Aunque Jacob y Esaú eran mellizos, uno de ellos sería más fuerte que el otro. Según Gn 32:6 y Gn 33:15, Esaú tenía por lo menos cuatrocientos hombres consigo y estaba dispuesto a dejar algunos de ellos para Jacob. Aparte de la fuerza militar, Esaú y sus descendientes pudieron reinar como reyes en la tierra de Edom, antes que tuvieran rey los hijos de Israel (Gn 36:31). Ocultar respuesta

• 11d.

  “El mayor servirá al menor”;         Mostrar respuesta La última frase implica específicamente que aunque Esaú era el mayor, eventualmente se sometería a su hermano menor, Jacob. La historia de los descendientes de Esaú revela repetidas ocasiones donde se sometieron a los israelitas. Por ejemplo, la sumisión de los edomitas a los israelitas se menciona a lo largo de la época de Moisés, el rey David, el profeta Amós y el profeta Abdías (2 Sam 8:11-14; Ex 15:15; Nm 24:18; Am 9:11-12; Abd 1:18 y 1 Re 11:15-16). Ocultar respuesta

• 12a.

  Apunte los diferentes rasgos físicos de Esaú y Jacob. Esaú;         Mostrar respuesta El libro de Génesis describe a Esaú como el primero que salió y era rubio. Era todo velludo como una pelliza, y le pusieron por nombre Esaú (Gn 25:24, 25). Además, el autor del Génesis narra que Esaú fue diestro en la caza y hombre del campo (Gn 25:27). Ocultar respuesta

• 12b.	Jacob;         Mostrar respuesta Según el libro de Génesis, Jacob salió después, trabada su mano al talón de Esaú, y le pusieron por nombre Jacob (Gn 25:26). A diferencia de su hermano Esaú, Jacob era lampiño (Gn 27:11), un hombre tranquilo que habitaba en tiendas (Gn 25:27). Ocultar respuesta

• 13a.	¿Cómo Isaac y Rebeca trataron diferente a sus hijos?         Mostrar respuesta El autor del Génesis explica que mientras Isaac amaba a Esaú porque comía de su caza, Rebeca amaba a Jacob (Gn 25:28). Ocultar respuesta

• 13b.

  ¿Cuál fue el resultado de tal tratamiento? ¿Cómo nos sirve como advertencia en la crianza de los hijos?         Mostrar respuesta Debido a que Isaac comía de la caza de Esaú, el libro de Génesis nos describe que Isaac amaba a Esaú (Gn 25:28). Aunque el Señor le había dicho a Rebeca que el mayor serviría al menor (Gn 25:23), Isaac insistió en bendecir a Esaú, el mayor, con las mismas palabras del Señor (Gn 27:29). Rebeca, por amor a Jacob, estuvo dispuesta a mentirle a Isaac para que fuera Jacob quien recibiera la bendición (Gn 27:8-10). El trato diferente de Isaac y Rebeca hacia sus hijos nos sirve hoy como advertencia. Mostrar preferencia y amar a un hijo más que al otro, no solo resulta perjudicial para la relación entre los hijos, sino también para la relación entre marido y mujer. Dado que cada uno tenía su hijo favorito, tanto Isaac como Rebeca tomaron decisiones de acuerdo con su propio juicio y no tuvieron en cuenta la opinión del otro. Sus actos no solo empeoraron la relación, sino también provocaron una enemistad entre sus dos hijos. Ocultar respuesta

• 25:29-34

  14a.

  ¿Cómo veía Esaú su primogenitura? Véase también Heb 12:16.         Mostrar respuesta El libro de Génesis narra que Esaú menospreció su primogenitura (Gn 25:34). El autor del libro de Hebreos aclara que Esaú fue considerado profano, fornicario o mundano porque por una sola comida vendió su primogenitura (Heb 12:16). Esaú había intercambiado lo que era temporal con el derecho que Dios le había dado de por vida. Ocultar respuesta

• 14b.

  ¿Qué acciones hizo Esaú en apoyo de su punto de vista de la primogenitura? ¿Por qué los hizo?         Mostrar respuesta Al estar Esaú muy cansado, estuvo dispuesto a vender su primogenitura a cambio del guiso rojo (Gn 25:29-31). Incluso juró el intercambio de su primogenitura (Gn 25:33). Hizo el intercambio sólo para satisfacer su hambre y cansancio. Esaú pensó que se estaba muriendo por su hambre y cansancio (Gn 25:32), y si no comía del guiso rojo, la primogenitura no tendría ningún significado en absoluto. Pero las Escrituras enfatizan que Esaú menospreció su primogenitura, prefirió satisfacer y saciar su hambre y cansancio físico que aferrarse al derecho de la primogenitura. Incluso después de haber terminado de comer y beber, se levantó y siguió su camino sin pensar ni arrepentirse de la primogenitura que acababa de vender a Jacob (Gn 25:34). Ocultar respuesta

• 14c.

  ¿Qué lección podemos aprender de las acciones de Esaú hacia su primogenitura?         Mostrar respuesta El evento de Esaú y su primogenitura sirve como un recordatorio para que valoremos y prioricemos la herencia piadosa sobre las necesidades mundanas. Hoy, la promesa de salvación de Dios y la herencia del reino celestial son mucho más valiosas que cualquier cosa de este mundo. Por lo tanto, el Señor Jesús nos recuerda: “¿De qué le servirá al hombre ganar todo el mundo, si pierde su alma? ¿O qué dará el hombre a cambio de su alma?” (Mt 16:26). No tendrá sentido alcanzar los éxitos del mundo si se pierde el alma, ya que es imposible disfrutar del beneficio de los éxitos sin la propia vida. ¡Cuánto más será la pérdida si uno pierde su salvación! Ocultar respuesta

• 15a.	¿Cómo vio Jacob la primogenitura de Esaú?         Mostrar respuesta De sus propias palabras a Esaú, Jacob vio la primogenitura de Esaú como algo que se podía negociar y que se debía conseguir con prisa (Gn 25:31). Ocultar respuesta

• 15b.

  ¿Qué acciones hizo Jacob en apoyo de su punto de vista sobre la primogenitura de Esaú? ¿Por qué los hizo?         Mostrar respuesta Jacob aprovechó el hambre y el cansancio de su hermano Esaú para que éste le vendiera su primogenitura (Gn 25:30-31). En otras palabras, Jacob no le daría el guiso rojo a Esaú a menos que éste le vendiera su primogenitura ese mismo día. Y a fin de asegurar el negocio, Jacob hizo jurar a Esaú el intercambio (Gn 25:33). A través del juramento, Esaú había vendido intencional y formalmente su primogenitura y ya no podía recuperarla más, porque le pertenecía ahora a Jacob. Jacob insistió en tomar la primogenitura de Esaú porque valoraba el beneficio y el poder de la primogenitura. Sabiendo que como hijo menor no había recibido el derecho del primogénito, buscó la manera de obtenerlo. Además de que podía obtener una doble porción de la herencia de su padre y que simbolizaba la excelencia de la dignidad y el poder de su padre, obtener el derecho de la primogenitura también hizo que Jacob fuera superior a su hermano Esaú. Ocultar respuesta

• 15c.

  ¿Qué lección podemos aprender de las acciones de Jacob hacia la primogenitura de Esaú?         Mostrar respuesta Cuando Rebeca quedó embarazada, el Señor le prometió que la mayor serviría a la menor (Gn 25:23). En otras palabras, el Señor le prometió a Jacob su bendición. Según las palabras de Esaú en Gn 27:36, la bendición y la primogenitura eran dos cosas diferentes. Por lo tanto, como hijo menor, Jacob no merecía el derecho de la primogenitura. Jacob no solo tomó algo que no le pertenecía, también lo tomó con engaño. Jacob engañó tanto a su padre Isaac como a su hermano Esaú para obtener la primogenitura (Gn 27:35, 36). El engaño de Jacob no sólo hirió los sentimientos de su padre, sino que también causó odio en el corazón de Esaú. Las acciones de Jacob nos sirven como advertencia de que usar todo medio para alcanzar el resultado que uno quiere es impío. El Señor Jesús nos ha advertido: “Pero sea vuestro hablar: “Sí, sí” o “No, no”, porque lo que es más de esto, de mal procede” (Mt 5:37). La advertencia del Señor Jesús para nosotros es clara, el engaño viene del maligno. Si seguimos viviendo en el engaño y nos acomodamos a él, poco a poco perderemos la conciencia y la capacidad de discernir entre el bien y el mal. Ocultar respuesta