Contexto

En el pasaje anterior, vimos que el ministerio de Jesús comenzó a llamar la atención de los líderes religiosos (5:17). Esta lección examinará las controversias que acontecieron. Los escribas y los fariseos primero se quejaron de los discípulos y luego de Jesús. En la última controversia, Jesús hizo algo que desafió las creencias de los que lo acusaban. La resistencia de los escribas y fariseos crecía con cada incidente, hasta que finalmente conspiraron contra Jesús.

Versículo clave

(5:32, 6:5)

¿Sabía usted que...?

1. Leví (5:27): el otro nombre de Mateo (Mt 9:9).
2. Panes de la proposición (6:4): literalmente, “pan del rostro”, es decir, pan que se colocaba en la presencia de Dios (Ex 25:30, 35:13, 39:36, etc.) […] Los panes de la proposición consistían en doce panes horneados, hechos de harina fina; cada pan era de dos décimas de efa… Eran colocados en dos hileras, seis en cada hilera (ma’areket, Lv 24: 6). [ref]

Esquema

Análisis del segmento

  • 5:27-32

    1a.

    ¿Por qué es destacable que Jesús haya escogido a Leví como discípulo?

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    Jesús escogió a un publicano, un marginado social y religioso.

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  • 1b.

    ¿Qué nos dice esto de la naturaleza del llamamiento de Dios?

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  • 2a.

    Pareciera que Leví respondió al llamado de Jesús sin ninguna vacilación. Pero suponga que usted fuera Leví, ¿qué haría si tuviera que dar un paso tan importante en su vida? ¿Qué obstáculos podrían impedirle seguir al Señor?

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  • 2b.

    De la experiencia de Leví, ¿qué puede aprender sobre el discipulado?

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    Cuando el Señor nos llama a obedecer su voluntad, debemos responder de inmediato y dedicarnos al llamado con todo corazón, aunque sea difícil poner de lado nuestros planes, compromisos y deseos.

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  • 3a.

    ¿Por qué se quejaban los fariseos y escribas?

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    En la sociedad de aquel momento, comer y beber con alguien implicaba aceptar a esa persona. Por lo tanto, el hecho de que Jesús y sus discípulos comieran con los “pecadores” desafiaba directamente las enseñanzas y tradiciones de los fariseos.

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  • 3b.

    ¿En qué situaciones pensamos y actuamos como los escribas y los fariseos en esta historia?

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  • 4a.

    ¿Quiénes son los “justos” y los que están “sanos”?

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    En cierto sentido, los “justos” y los “sanos” son aquellos que guardan fielmente los mandamientos de Dios. Pero como nadie puede ser justo delante de Dios, Jesús probablemente se estaba refiriendo a aquellos que se creían justos.

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  • 4b.

    ¿Quiénes son los “pecadores” y los “enfermos”?

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    Al igual que “justos” y “sanos”, estas dos palabras, “pecadores” y “enfermos”, también podrían tener un doble significado. Podrían referirse a aquellos que son considerados pecadores por otros. Pero como todos somos pecadores ante Dios, es más probable que Jesús se estuviera refiriendo a todo aquél que es lo suficientemente humilde como para arrepentirse.

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  • 4c.

    ¿Por qué es irónico lo que dijo Jesús?

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    Jesús dijo que Él había venido a llamar a pecadores al arrepentimiento. Si bien todos somos pecadores y necesitamos arrepentirnos, sólo aquellos que son lo suficientemente humildes reconocen que son pecadores y pueden recibir la gracia de Dios a través del arrepentimiento. Aquellos que piensan que son justos, han renunciado a la gracia de Dios, por lo que la salvación de Cristo no les será de beneficio. Si bien los escribas y los fariseos despreciaban a los pecadores, ellos mismos habían sido rechazados por Dios.

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  • 4d.

    Según lo que dijo Jesús, ¿cómo podemos recibir la gracia de Dios?

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    El arrepentimiento es la clave para recibir la gracia de Dios. El arrepentimiento comienza con la forma en que una persona se ve a sí misma. Debemos reconocer nuestros pecados con humildad y responder al llamado de Cristo abandonando nuestros pecados.

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  • 5:33-39

    5.

    ¿Cuál es el punto de la pregunta sobre el ayuno (33)?

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    Para los fariseos, el ayuno era una indicación de piedad (cf. 18:12). Es por eso que los escribas y los fariseos acusaron implícitamente a los discípulos de llevar un estilo de vida que se consideraba inapropiado para los devotos y religiosos.

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  • 6.

    Explique la analogía de los versículos 34-35.

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    Juan el Bautista les había dicho a sus discípulos que Jesús era el novio y él era el amigo del novio (Jn 3:29). Dado que la presencia de Jesús, el novio, era una ocasión para alegrarse, sería inapropiado que los discípulos ayunaran mientras Jesús estuviera con ellos. Sin embargo, ellos seguramente ayunarán luego del arresto y la muerte de Jesús (Hch 13:3, 14:23). Jesús no estaba negando la práctica del ayuno, sino que, como podemos ver en los versículos que siguen, estaba hablando de hacer lo que es apropiado para la ocasión.

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  • 7.

    ¿Cuál es el propósito del ayuno? ¿Cómo malinterpretaron los escribas y los fariseos el propósito del ayuno?

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    El ayuno grupal o individual se hacía generalmente para humillarse ante Dios, a menudo acompañado con el arrepentimiento (Neh 9:1, 2; Sal 35:13; Is 58:3, 5; Dn 9:2-10, 10:2, 3; Jon 3:5; Hch 9:9) o como una petición especial al Señor (Dt 9:18; Jue 20:26, 2 S 1:12; 2 Cr 20:3; Esd 8:21-23; Est 4:16; Hch 14:23). El ayuno también se hacía en conexión con la devoción y el servicio a Dios (Lc 2:36, 37; Hch 13:2, 3; Mt 4:1-2). Orar en ayunas, si es que se lo hace con sinceridad, es poderoso; incluso puede echar fuera demonios (Mt 17:21).

    Los escribas y los fariseos, habiendo descuidado el espíritu del ayuno, lo habían convertido en un símbolo de devoción religiosa y un medio para juzgar a los demás.

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  • 8a.

    ¿A qué se refieren el “vestido nuevo” y el “vino nuevo”? ¿Y el “vestido viejo” y “odre viejo”?

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    El vestido nuevo y el vino nuevo se refieren al ministerio de Jesús, mientras que el vestido viejo y el odre viejo se refieren a la vieja manera de pensar de las tradiciones religiosas humanas.

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  • 8b.

    ¿Por qué son incompatibles? ¿Qué significa esta parábola?

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    No era apropiado que la gente tratara de encajar el ministerio de Jesús en el antiguo marco de las leyes farisaicas. Así como Jesús enfatizó en sus enseñanzas en el monte, la venida del reino de Dios debe ser aceptada con una nueva mentalidad y actitud, no con la rígida y superficial observación de costumbres religiosas.

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  • 8c.

    Explique el versículo 39.

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    Jesús simplemente estaba señalando la indisposición de la gente a cambiar.

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  • 6:1-5

    9.

    Al defender a los discípulos, ¿estaba Jesús aboliendo el mandamiento de Dios de guardar el sábado?

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    Si bien algunos han usado equivocadamente estas palabras de Jesús como base para eliminar el mandamiento del sábado, en ninguna parte de la Biblia Jesús indica que los creyentes no deban guardar el sábado. El punto de contención aquí no era si se debía guardar el sábado, sino cómo guardarlo en su verdadero espíritu.

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  • 10.

    ¿Qué quiso demostrar Jesús al citar la historia de David?

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    Dios no condenaría a una persona por quebrantar su ley si lo que hizo fue para satisfacer una necesidad inmediata. La violación por parte de los discípulos de las restricciones del sábado no fue para complacerse sino que lo hicieron por hambre mientras seguían al Señor. Así que lo que hicieron tiene justificación.

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  • 11.

    ¿Qué significa “el Hijo del hombre es Señor aun del sábado”?

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    El Señor Jesús, que es el Dios eterno, estableció el sábado, por lo que es más grande que el sábado. Como el Señor del sábado, Él es a quien debemos honrar por encima del sábado. Si Él no condenó a los discípulos, nadie más tiene el derecho de hacerlo.

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  • 12.

    ¿Qué lección podemos aprender aquí sobre el espíritu de observar los mandamientos de Dios?

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    En Mateo 12:7, el Señor Jesús reforzó este principio divino: “Misericordia quiero y no sacrificios”. En lo que a Dios concierne, el amor y la misericordia tienen prioridad sobre las observaciones ceremoniales (sin negar esto último). Cuando guardamos los mandamientos de Dios, debemos tener cuidado de no convertir nuestra obediencia en meros rituales religiosos y perder de vista el propósito de estos mandamientos previsto por Dios.

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  • 6:6-11

    13a.

    ¿Estaban los fariseos realmente interesados en guardar el mandamiento de Dios? ¿Por qué “acechaban” (“no le quitaban la vista de encima”, NVI) a Jesús?

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  • 13b.

    A veces nosotros también “acechamos” a otras personas de la misma manera que los fariseos acecharon a Jesús. ¿Qué revela esto sobre nosotros mismos? ¿Cómo podemos corregir esta actitud?

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  • 14a.

    ¿De qué manera la pregunta que Jesús hizo en el versículo 9 señala el error de los escribas y los fariseos?

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    Mientras que los escribas y fariseos sólo se enfocaban en los detalles de las regulaciones del sábado (aunque la ley que prohibía sanar en sábado era de origen rabínico y no un mandamiento de Dios), Jesús se preocupaba más por hacer lo que le agradaba a Dios en el sábado. La pregunta de Jesús señaló que abstenerse de hacer el bien para ayudar a alguien en necesidad es, en realidad, algo malo y que rehusarse a salvar una vida es destruirla. Aunque Jesús pudo haber esperado hasta el día siguiente para sanar a la persona, Él tomó la iniciativa de sanar al hombre para demostrar que las restricciones que sus acusadores habían impuesto sobre el mandamiento del sábado eran, en realidad, una violación grave a la ley de Dios.

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  • 14b.

    ¿Por qué Jesús “se quedó mirando a todos los que lo rodeaban” (10, NVI) luego de hacer la pregunta? (10)

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    Estaba esperando que la gente tuviera una respuesta en su corazón. Jesús apeló a su consciencia, esperando que pudieran reconsiderar lo que es correcto ante Dios.

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  • 15.

    ¿Por qué los fariseos y los escribas “se llenaron de furor”?

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