Contexto

El autor traza una clara distinción entre los verdaderos y los falsos creyentes. También asegura a los verdaderos creyentes sobre su conocimiento del evangelio y la promesa de la vida eterna. En esta sección y las que siguen, llama a los creyentes “hijos de Dios” y enfatiza nuevamente el tema de vivir una vida que imite a Cristo.

Versículo clave

(3:9)

¿Sabía usted que...?

Esquema

• Purificándonos para su venida
  (2:28-3:3)
• Viviendo una vida sin pecado en Cristo
  (3:4-6)
• Hijos de Dios vs. hijos del diablo
  (3:7-10)

Palabras/frases claves

conocer/saber, hijos de Dios/nacidos de Dios, justicia, pecado, permanecer

Análisis general

• 1.	Según este pasaje, ¿qué caracteriza a los hijos de Dios?         Mostrar respuesta Esperan la aparición del Señor, por lo que se purifican a sí mismos (2, 3). No pecan (6, 9). Practican la justicia (2:29, 3:7). Aman a sus hermanos (10). Ocultar respuesta

Análisis del segmento

• 3:1-3

  1a.	¿Cuál es el tono de 3:1?         Mostrar respuesta Tono de estar maravillado y entusiasmado. Ocultar respuesta

• 1b.	¿Qué pide el autor a sus lectores que miren?         Mostrar respuesta El maravilloso amor que Dios nos ha otorgado al hacernos sus hijos. Ocultar respuesta

• 1c.

  ¿Qué importancia tiene la declaración de que somos hijos amados de Dios en las enseñanzas subsiguientes?         Mostrar respuesta Dios nos ama tanto que nos ha hecho sus hijos, por lo que debemos vivir para agradarle. Si siempre nos maravillamos por el gran amor de Dios, pondremos en práctica su voluntad. Además, si en verdad nacemos de Dios, viviremos conforme a su semejanza, teniendo pureza y amor. Ocultar respuesta

• 2a.	¿Cómo es que el mundo no conoció a Dios?         Mostrar respuesta El mundo no reconoce a Jesucristo ni lo acepta (Jn 1:10-13, 7:7). En vez de vivir conforme a la imagen de Dios, el mundo se complace en la concupiscencia y el orgullo. Ocultar respuesta

• 2b.	¿Qué significa “el mundo no nos conoce”? ¿Experimenta en su vida cotidiana que es extraño y ajeno para el mundo?         Mostrar respuesta El mundo no puede entender ni aceptar el estilo de vida de los creyentes (1 Pe 4:3, 4). Ocultar respuesta

• 3.	Explique el versículo 2 sobre nuestra semejanza en el futuro.         Mostrar respuesta A la venida de nuestro Señor Jesucristo, seremos transformados para ser como Él, tendremos un cuerpo espiritual que es inmortal y glorioso (1 Co 15:42-53). Ocultar respuesta

• 4.	¿Cuál es la conexión entre los versículos 2 y 3?         Mostrar respuesta Dado que esperamos ser como Dios cuando Él aparezca, debemos ahora ser como Él purificándonos. Ocultar respuesta

• 5.	¿Cómo nos purificamos?         Mostrar respuesta Si confesamos nuestros pecados y andamos en la luz, la sangre de Cristo nos limpia de nuestros pecados (1:7, 9). Practicar la justicia es la forma activa de purificarnos para imitar la pureza de Dios (7). Ocultar respuesta

• 3:4-10

  6.

  Anote sus observaciones sobre lo siguiente: a. Definición de pecado b. Fuente de pecado c. Poder sobre el pecado d. Un ejemplo de pecado         Mostrar respuesta a. Infracción (4). Significa transgresión o rechazo a la ley de Dios. b. El diablo (8). c. Necesitamos nacer de Dios por fe en Jesucristo debido a que Él vino para destruir las obras del diablo (8,9). d. No amar a nuestro hermano (10). Ocultar respuesta

• 7.

  ¿No es el versículo 7 contrario a la justificación solo por la fe? (vea Ro 3:20-28)         Mostrar respuesta Este versículo no dice que practicar la justicia nos hace justos. De hecho todos debemos confesar que hemos pecado (1:8-10). Lo que el versículo enseña es que si decimos ser hijos de Dios pero andamos en pecado, mentimos. Los verdaderos hijos de Dios que permanecen en Él practicarán lo que es justo. A través de esto demuestran que han nacido de Dios. Ocultar respuesta

• 8.

  ¿Cómo destruye Cristo las obras del diablo?         Mostrar respuesta Jesucristo tomó la forma de un hombre pecador. Pero Él fue sin pecado, y por esto condenó al pecado mientras estuvo en la carne (Ro 8:3). Por su muerte expiatoria, destruyó las obras del diablo y nos liberó del temor a la muerte (Heb 2:14, 15). Hoy, los que están en Cristo ya no siguen bajo el control del diablo, porque son liberados de la condenación. Ocultar respuesta

• 9.	¿Qué dice este pasaje acerca de los hijos del diablo?         Mostrar respuesta No han visto ni conocido a Dios. Viven en pecado (8a). No practican justicia ni aman a sus hermanos (10). Ocultar respuesta

• 10.

  ¿Enseña el versículo 9 que los creyentes nunca pecan en sus vidas?         Mostrar respuesta Si el versículo enseña que los creyentes no tienen pecado y nunca cometen pecado, entonces sería una contradicción para 1:8-10. Algunas versiones de la Biblia traducen “cometer” como “practicar”. Compare también “permanecer en Él” con “pecar” en el versículo 6. El contexto de la carta muestra que los que son nacidos de Dios permanecerán en Dios, no en el pecado. Alguien que ha recibido vida nueva no puede continuar en el pecado, a menos que se haya desviado de la verdad. Ocultar respuesta

• 11.

  ¿Cuál es la simiente que está en el creyente?         Mostrar respuesta En términos generales, la simiente se refiere a nuestro renacer. En específico, se podría referir a la palabra de verdad. Somos nacidos de Dios por la palabra de verdad (Sant 1:18; Mt 13:23). Si somos hijos de Dios, su palabra permanecerá en nosotros para que no pequemos (Sal 119:11). Ocultar respuesta

• Pensamientos Finales

  12.	¿Cómo la venida de Cristo le inspira en su camino de fe?         Mostrar respuesta (La respuesta está vacía) Ocultar respuesta