Contexto

En esta lección estudiaremos la inusual apertura elaborada de la carta a los Romanos. En ella, Pablo no solo se introduce a los creyentes en Roma, sino que también expresa su convicción en el evangelio que se le ha confiado y su ferviente deseo de compartir su fe con ellos.

Versículo clave

(1:16)

¿Sabía usted que...?

1. Roma (1:7) fue “la ciudad-estado en Italia que se convirtió en un imperio que gobernaba gran parte del mundo occidental en el tiempo de inicio del cristianismo”. ^[ref]

Esquema

• Identificación y saludo
  (1:1-7)
• Acción de gracias y añoranza
  (1:8-15)
• Evangelio de Cristo
  (1:16-17)

Palabras/frases claves

“deseo veros”, deudor, Evangelio, fe, Hijo de Dios, Jesucristo, justicia de Dios, justo, linaje de David, no me avergüenzo, Pablo, poder de Dios, salvación, todo aquel que cree, vosotros que estáis en Roma

Análisis general

• 1a.

  Anote lo que Pablo dice acerca de él y su relación con el evangelio.         Mostrar respuesta Apartado para el evangelio de Dios (1). Se ve a sí mismo como deudor de todos. Este entendimiento lo motiva a predicar el evangelio a los que están en Roma (14-15). No se avergüenza del evangelio de Cristo (16). Ocultar respuesta

• 1b.	¿Cómo describiría la actitud de Pablo hacia el evangelio?         Mostrar respuesta (La respuesta está vacía) Ocultar respuesta

• 1c.	Compare la actitud de Pablo y la suya hacia el evangelio.         Mostrar respuesta (La respuesta está vacía) Ocultar respuesta

Análisis del segmento

• 1:1-7

  1.	¿Cuáles son las tres cosas que Pablo dice acerca de él aquí?         Mostrar respuesta Siervo de Jesucristo Llamado a ser apóstol Apartado para el evangelio de Dios Ocultar respuesta

• 2.	¿De qué se trata el evangelio (es decir, “a qué se refiere”)?         Mostrar respuesta El evangelio se refiere al Hijo de Dios, Jesucristo nuestro Señor (3). Ocultar respuesta

• 3.

  ¿Cómo Pablo identifica a Jesucristo? En términos de: a. Su descenso físico b. Su divinidad         Mostrar respuesta a. Nació del linaje de David según la carne (3). b. Fue declarado Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos (4). Ocultar respuesta

• 4.

  ¿Qué es la “obediencia de la fe” y cómo debemos obedecer la fe?         Mostrar respuesta La “obediencia de la fe” de la que Pablo habla nuevamente al final de la carta (Ro 16:26), es el resultado y la meta del evangelio de Jesucristo. La “obediencia de la fe” se refiere a la obediencia que se basa en la fe. La verdadera fe en el Señor no es simplemente estar de acuerdo con algunos hechos acerca de Jesús, sino someterse a Él como Señor, lo que resulta en una forma de vida que se ajusta a su naturaleza divina. Mientras que una vez fuimos hijos de desobediencia, siguiendo los deseos de la carne y viviendo bajo la ira de Dios, ahora pertenecemos completamente a Cristo y, por lo tanto, debemos vivir para agradarle en todo (cf. 1 Tes 1:9-10; Ro 6:4; Ef 2:1-10; Col 3:1-4:6; Sant 2:1, 14-17)(1 Pe 1:10-25)(2 Pe 1:3-4). Ocultar respuesta

• 5.	¿Cómo Pablo identifica a los creyentes en Roma?         Mostrar respuesta “Los llamados a ser de Jesucristo” entre todas las naciones (6). Los amados de Dios (7). Los que son llamados a ser santos (7). Ocultar respuesta

• 1:8-15

  6.	¿Por qué razón Pablo agradece a Dios?         Mostrar respuesta Agradece a Dios porque la fe de los creyentes en Roma se divulga por todo el mundo (8). Ocultar respuesta

• 7.

  ¿Cuál es el propósito de Pablo al desear visitar a los creyentes en Roma?         Mostrar respuesta Pablo espera impartirles algún don espiritual, para que se fortalezcan y sean confortados junto con él (11-12). También espera anunciar el evangelio a los que están en Roma y así tener algún fruto entre los creyentes (13-15). Ocultar respuesta

• 8a.

  ¿Por qué Pablo se considera como un deudor?         Mostrar respuesta Pablo se considera deudor a los gentiles debido a la comisión que Dios le ha encomendado de predicarles el evangelio (cf. 1 Co 9:16-17; Hch 26:17-18). En vista de esta obligación que Dios le ha impuesto, Pablo se auto identifica como “siervo de Jesucristo, llamado a ser apóstol, apartado para el evangelio de Dios” (Ro 1:1). Ocultar respuesta

• 8b.

  ¿Qué nos enseña esto respecto a la predicación del evangelio?         Mostrar respuesta Habiendo recibido la orden de nuestro Señor de predicar el evangelio a toda criatura (Mc 16:15; Mt 28:19), respondemos directamente al Señor si cumplimos fielmente con nuestro deber al dar a conocer a otros acerca de Cristo. Como Pablo, somos deudores a las almas perdidas del mundo. Siempre debemos tener este sentido de endeudamiento para que podamos estar motivados a compartir las buenas nuevas. Ocultar respuesta

• 1:16-17

  9.	¿Cómo describe Pablo el evangelio? En términos de: a. Lo que es b. Su resultado final         Mostrar respuesta El evangelio es el poder de Dios (Ro 1:16). El propósito del evangelio es para “salvación de todo aquel que cree” (Ro 1:16). Ocultar respuesta

• 10.	¿En qué sentido la salvación de Dios se da primeramente a los judíos?         Mostrar respuesta (La respuesta está vacía) Ocultar respuesta

• 11.

  ¿Qué es la justicia de Dios?         Mostrar respuesta El estudio del Antiguo Testamento revela que la justicia de Dios describe una cualidad que posee Dios, el Rey y Juez supremo (cf. Sal 9:4, 45:6-7, 50:6). La justicia de Dios se manifiesta en dos formas relacionadas. Por un lado, Dios es justo en el sentido de que defiende la justicia perfecta y se venga de los impíos (Dt 32:4; Sal 11:4-7; Neh 9:33; Dn 9:14). Por otro lado, Dios revela su justicia a través de su misericordioso y poderoso acto de salvación por el bien de su pueblo (Sal 98:2; Is 46:13). Si bien en el Antiguo Testamento la justicia de Dios se centró en su raza escogida, las Escrituras también previeron el futuro reino universal de Dios sobre todas las naciones (Sal 9:8; Is 51:5). La justicia de Dios, tal como se expone en Romanos, refleja ambos aspectos de esta cualidad divina: la justicia de Dios y su misericordia. Siendo el Juez justo, Dios infligió su ira sobre toda impiedad e injusticia de los hombres (Ro 1:18). Esto incluye a los judíos, que no habían cumplido con los requisitos de la Ley, y a los gentiles, que no habían reconocido a Dios. Si bien Dios no deja el pecado sin castigo, también fue fiel a su promesa a Abraham de que sería el heredero del mundo por la justicia de la fe (Ro 4:13). Al enviar a su Hijo Jesucristo como propiciación por los pecados, Dios reveló su justicia al justificar a todos los que tienen fe en Él, tanto judíos como gentiles (Ro 3:21-26). Es por esta razón que Pablo escribe que la justicia de Dios se revela en el evangelio (Ro 1:16-17). Los versículos 16 y 17 están estrechamente relacionados en el sentido de que el último explica el primero. Al ver ambos versículos juntos, notamos que la justicia de Dios está asociada con “el poder de Dios” y “la salvación para todo aquel que cree”. La justicia de Dios es revelada en el evangelio porque el evangelio manifiesta el poder de Dios. El objetivo de este poder es la salvación para todo aquel que cree. A través del evangelio, la gracia de Dios está disponible para todos, desde los judíos hasta los gentiles. Por lo tanto, la poderosa salvación de Dios, con su alcance universal por medio del evangelio, es la manifestación externa de la justa cualidad interna de Dios. Ocultar respuesta

• 12a.

  ¿Cómo la justicia de Dios se revela en el evangelio “por fe y para fe” (Lit. de fe a fe)?         Mostrar respuesta La construcción “de A a A” en griego expresa rango, duración, repetición, origen y destino, estado anterior y nuevo estado o progresión (Quarles, p. 13). Por lo tanto, podemos entender que las palabras de Pablo en Romanos 1:17 significan que la justicia de Dios se revela en el evangelio de una manera que se origina con la fe y termina con la fe (es por fe, de principio a fin). Si consideramos colectivamente a todas las personas justas en la historia que han puesto su fe en Dios, entonces la justicia de Dios se revela de fe a fe en el sentido de que, así como Dios justificó a los fieles en el pasado, siendo Abraham el principal ejemplo (Ro 4:3), de igual forma continúa justificando a todos los que siguen los mismos pasos de fe, incluyendo judíos y gentiles (Ro 4:11-12, 23-24). A medida que la verdad del evangelio se va revelando en la historia, la fidelidad, la imparcialidad y la misericordia de Dios también llegarán a ser completamente evidentes. A nivel individual, podemos entender que la frase “de fe a fe” indica la completa jornada de fe del cristiano. La justificación que ha recibido de Dios comienza con la fe en el Señor Jesús y no se basa en las obras de la Ley (Ro 3:28, 9:30; Gl 3:10-12). Pero debe vivir por fe a través de la obediencia (cf. Ro 1:5, 15:26). La fe (que también se traduce como “fidelidad”) en el Señor no es un consentimiento mental temporal, sino un compromiso de por vida. Ocultar respuesta

• 12b.

  ¿Cómo la cita de Habacuc 2:4, que el justo por fe vivirá, apoya esta verdad?         Mostrar respuesta Habacuc 2:4 caracteriza la vida de los justos, la cual está arraigada en la fe. La frase “por fe” en griego es idéntica a “de fe” en Romanos 1:17. En segundo lugar, la declaración profética de que el justo vivirá por fe también enseña que el justo debe persistir en la fe hasta el fin (Heb 10:35-39; cf. Gl 5:5). Por lo tanto, la profecía de Habacuc también explica la frase “para fe” (“a fe”) en Romanos 1:17. En resumen, Habacuc 2:4 ha profetizado que los justos vivirán ante Dios por medio de la fe de principio a fin. Al justificar al creyente por medio de la fe y otorgarle la vida eterna, Dios a su vez revela su propia justicia (Ro 3:26). Porque la justificación del creyente es un signo de la justicia, la misericordia y la fidelidad de Dios a sus promesas. Ocultar respuesta

• 13.	¿Cuáles son algunas de las razones por las que un creyente puede avergonzarse del evangelio?         Mostrar respuesta (La respuesta está vacía) Ocultar respuesta