Contexto

Esta lección continúa con el tema de las enseñanzas de Jesús sobre el reino de Dios. Las tres secciones más largas (9-30) tratan de las condiciones para entrar en el reino de Dios. Cada una de ellas enfatiza la actitud correcta que debemos tener hacia Dios, así como la incompatibilidad entre los caminos del hombre y los caminos de Dios. Sólo si estamos dispuestos a cambiar para conformarnos a los caminos de Dios podremos entrar en su reino.

Versículo clave

(18:14, 18:29-30)

¿Sabía usted que...?

Esquema

  • La parábola del fariseo y el publicano
  • Jesús bendice a los niños
  • El joven rico
  • Predicción del sufrimiento, la muerte y la resurrección de Jesús

Análisis del segmento

  • 18:9-14

    1.

    Anote al menos dos cosas que están mal en la oración del fariseo (11-12).

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Pensó que era justo ante Dios y pasó por alto sus defectos. Menospreciaba a otros. Su oración no era una oración verdadera porque en vez de buscar la gracia de Dios sólo “oraba consigo mismo” (11).

    Ocultar respuesta

  • 2.

    ¿Qué podemos aprender del publicano con respecto a la actitud que debemos tener ante Dios?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Debemos sentir remordimiento por nuestros pecados y darnos cuenta de que no merecemos el perdón de Dios. En vez de compararnos con otros, debemos ver sólo nuestra pecaminosidad y buscar la misericordia de Dios.

    Ocultar respuesta

  • 3.

    ¿Qué hace que una persona se auto-justifique? ¿Qué hace que una persona sea humilde?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Tendemos a auto-justificarnos cuando vemos sólo las cosas buenas que hemos hecho y cuando nos comparamos con otros. Pero cuando nos comparamos con la perfección de Dios y vemos nuestros pecados, seremos humildes.

    Ocultar respuesta

  • 4.

    ¿Por qué Jesús eligió a un fariseo y a un publicano como personajes de esta historia? ¿Cuál era su propósito?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Los fariseos eran considerados por la gente como piadosos. Supuestamente eran más justos ante Dios que los demás. El publicano, sin embargo, que representaba a los marginados sociales y a los pecadores, no tenía lugar en el reino de Dios. Usando estos dos extremos, el Señor nos enseña que nadie puede ser justo ante Dios, independientemente de cuánto bien haya hecho, a menos que se humille y acepte la gracia de Dios.

    Ocultar respuesta

  • 18:15-17

    5.

    Según su opinión, ¿por qué los discípulos reprendieron a los que llevaban niños a Jesús? ¿Alguna vez ha cometido el mismo error?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Tal vez pensaban que los niños no eran importantes y no merecían que Jesús se distrajera por ellos.

    Ocultar respuesta

  • 6.

    Si usted tuviera hijos, ¿qué haría para que sus hijos vinieran al Señor?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Necesitamos hacer lo posible para que tengan un conocimiento personal de Dios y fe en Cristo, criándolos en disciplina y amonestación del Señor (Ef 6:4).

    Ocultar respuesta

  • 7.

    ¿Qué significa “recibir el reino de Dios como un niño”?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Recibir el reino de Dios como un niño significa aceptar a Jesucristo como lo haría un niño: con humildad, sinceridad y confianza.

    Ocultar respuesta

  • 18:18-30

    8.

    ¿Por qué el Señor corrigió la manera en que el dignatario se refirió a Él (18-19)? ¿Qué podemos aprender aquí sobre lo que piensa el dignatario de la vida eterna?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    El dignatario se refirió a Jesús como “Maestro bueno” probablemente porque midió la bondad de Jesús con los estándares humanos. Debido a su concepto erróneo sobre la bondad, el dignatario creía que podía heredar la vida eterna a través de buenas obras. Es por eso que el Señor lo corrigió y lo apuntó hacia la bondad de Dios, enfatizando que nadie es “bueno” excepto Dios. En otras palabras, nadie puede justificarse delante de Dios debido a sus buenas obras o bondad.

    Ocultar respuesta

  • 9a.

    ¿Qué impidió al dignatario entrar en el reino de Dios?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    La orden de venderlo todo revela el defecto del dignatario (“Aún te falta una cosa”). Lo que le impidió entrar en el reino de Dios fue su falta de voluntad a abandonarlo todo para seguir a Cristo.

    Ocultar respuesta

  • 9b.

    ¿Cómo la tristeza del dignatario muestra que él aún no había guardado los mandamientos de Dios a pesar de que pensaba que lo había hecho?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Su renuencia muestra que él no amaba al Señor Dios con todo su corazón, con toda su mente y con toda su alma, ya que no podía renunciar a sus posesiones por Dios. No sólo así, también muestra que él no había obedecido perfectamente el mandamiento de amar a su prójimo como a sí mismo.

    Ocultar respuesta

  • 10.

    ¿Por qué es tan difícil para los que tienen riquezas entrar en el reino de Dios?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Es difícil para los que tienen riquezas abandonar su fortuna y usar sus riquezas para Dios. Las riquezas proponen un gran reto dado que somos fácilmente tentados a servir nuestros propios intereses con nuestro dinero y no servir a Dios (16:13).

    Ocultar respuesta

  • 11a.

    ¿Qué enseña este pasaje acerca de la salvación por gracia?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Desde el punto de vista humano, lo que el Señor requiere de nosotros es imposible de alcanzar. Es por eso que la gente preguntó: “¿Quién, pues, podrá ser salvo?”. No obstante, por su gracia, Dios es capaz de salvarnos y lograr en nosotros lo que es humanamente imposible (cf. 17:5-6).

    Ocultar respuesta

  • 11b.

    Considerando la enseñanza del Señor, ¿cómo podemos entrar en el reino de Dios?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Debemos entregarnos a nosotros mismos y todas nuestras posesiones al Señor y convertirnos en seguidores de Cristo. Debemos vivir para Cristo y permitir que Él sea el Señor de nuestras vidas.

    Ocultar respuesta

  • 12.

    ¿Qué bendiciones da Dios a los que lo abandonan todo por causa de su reino?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Vea el versículo 30.

    Ocultar respuesta

  • 18:31-34

    13a.

    ¿De qué manera la predicción de Jesús muestra que era consciente de su misión?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Jesús sabía que su viaje a Jerusalén y los inminentes sufrimientos que padecería eran para cumplir el plan de salvación de Dios que los profetas habían predicho (31).

    Ocultar respuesta

  • 13b.

    ¿Cómo se relaciona con el reino de Dios?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Antes de que el reino de Dios se cumpla, el Rey en persona debía sufrir muchas cosas y morir para redimir a su pueblo (17:25; Jn 11:50).

    Ocultar respuesta