Contexto

Del incidente de Abraham y Abimelec en Gerar, la narración se enfoca ahora en el nacimiento del hijo prometido de Dios. Aquí, Abraham se inquietaba entre escuchar el pedido de su mujer de echar fuera a Ismael, el hijo de la sierva, y escuchar su corazón para quedarse con Ismael junto con Isaac, el hijo prometido. Hoy, los dos hijos y las dos madres en conflicto se han convertido en un símbolo de la enseñanza entre los hijos de la carne y los hijos de la promesa.

Versículo clave

(21:12)

¿Sabía usted que...?

  1. Reirá (21:6): En hebreo, la palabra “reirá” tiene una pronunciación hebrea similar al nombre de Isaac.
  2. Beerseba (21:14): En hebreo, significa literalmente “pozo de siete”. El lugar está ubicado en una cuenca entre las montañas de Judea al norte y las tierras altas desérticas del Neguev al sur. Se considera como un moderno Tell es-Seba. En la antigüedad, Beerseba era el cruce de las principales rutas de caravanas que conducían tanto al oeste a Egipto como al norte a la costa. [ref]
  3. Parán (21:21) es el desierto moderno de El-Tih, al sur de Canaán (Gn 14:6). [ref]  La proximidad de Parán, entre el límite sur de Canaán y el norte del Sinaí, está cerca de Egipto. [ref]
  4. Tratar con falsedad (NVI) (21:23): En hebreo, esta frase se puede traducir literalmente como “mentira”.
  5. Un tamarisco (21:33) es un árbol pequeño del género Tamarix que tiene hojas como escamas de color verde azulado que cubren las ramas largas y delgadas, dando así sombra. El árbol es hermoso cuando se abren racimos de flores rosadas. [ref]
  6. Dios eterno (21:33): En hebreo, esta frase se puede traducir literalmente como “El Dios de la eternidad”.

Esquema

  • Sara concibió y dio a luz un hijo
  • Agar e Ismael fueron desterrados
  • Abraham y Abimelec hicieron un pacto

Análisis del segmento

  • 21:1-7

    1.

    ¿Cómo y cuándo concibió Sara?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Anteriormente, en Gn 18:10, Dios le prometió a Abraham que Sara, su mujer, que ya era de edad avanzada y le había cesado el período de las mujeres (Gn 18:11), tendría un hijo cuando Él volviera a él “al tiempo señalado”. Un año más tarde, cuando Abraham cumplió cien años, después de que el Señor se le apareció por primera vez a los noventa y nueve (Gn 17:1, 21:5), el Señor hizo exactamente lo que había prometido (Gn 21:1-3). Sara concibió exactamente en el tiempo señalado que Dios le había prometido a Abraham (Gn 21:2).

    Ocultar respuesta

  • 2.

    ¿Cuál fue el significado de la repetida frase “como había dicho Jehová”? Véase también Heb 6:13-18.

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    El Señor visitó e hizo por Sara tal como le había dicho a Abraham el año anterior en Gn 18:10. Dios hizo exactamente de acuerdo con lo que le había prometido a Abraham. De este evento, podemos aprender que a diferencia de las palabras de los hombres, Dios es fiel y sus palabras son dignas de confianza.

    El autor de Hebreos incluso explica que Dios al prometer y confirmar su promesa con un juramento a Abraham, es imposible que Dios mienta (Heb 6:17-18). Las palabras de Dios son verdaderas y confiables. Por lo tanto, el autor de Hebreos continúa amonestándonos para que tengamos un fortísimo consuelo en sus fieles palabras. En otras palabras, nuestra paciencia y firmeza en confiar en sus dichos y promesas no será en vano.

    Ocultar respuesta

  • 3.

    En este pasaje, ¿cuáles fueron los ejemplos de la obediencia de Abraham al Señor?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Después que nació su hijo, Abraham lo llamó Isaac, tal como el Señor lo había dicho (Gn 17:19). También circuncidó a Isaac cuando tenía ocho días, como Dios le había mandado previamente (Gn 17:12).

    Ocultar respuesta

  • 4a.

    Compare la risa de Sara en Gn 18:12 con la de Gn 21:6.

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    En Gn 18:11-12, la risa de Sara reflejaba su incredulidad ante la promesa de Dios del nacimiento de un hijo en su vejez. Más tarde, en Gn 21:6, fue el Señor quien hizo reír a Sara y a todos los que la rodeaban. Esta vez, fue una risa de felicidad por el cumplimiento de la promesa de Dios. No solo Sara, sino también las personas que se enteraron del parto de Sara se reirían con ella. Además, fue Dios quien la hizo reír para terminar con la tristeza y la frustración previa de Sara. A lo largo de la vida de matrimonio de Abraham y Sara, ninguno de los dos pudo experimentar el gozo de tener un hijo. Pero solo en la vejez de Abraham y Sara, pudieron tener un hijo (Gn 21:6-7).

    Ocultar respuesta

  • 4b.

    Comparte un momento de su vida en el que Dios le haya hecho reír de felicidad para acabar con sus tristezas y sufrimientos anteriores.

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta
    (La respuesta está vacía)
    Ocultar respuesta

  • 21:8-21

    5a.

    En este pasaje, ¿qué vio Sara y cómo reaccionó?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    En Gn 21:9, Sara vio que el hijo de Agar, la egipcia, se burlaba de Isaac. Como consecuencia, Sara le informó a Abraham y le dijo que echara fuera a la sierva y a su hijo (Gn 21:9, 10).

    Ocultar respuesta

  • 5b.

    ¿En qué se parece el trato de Ismael a Isaac al trato de Agar a Sara? Véase Gn 16:4.

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Anteriormente, en Gn 16:4, la sierva Agar despreció a su propia señora, Sara, no solo por su embarazo, sino también por su capacidad de dar herederos a Abraham y a Sara. El acto de Agar de despreciar a su señora estuvo influenciado por las palabras anteriores de Sara de que el Señor la había hecho estéril y que quizás podrían tener hijos a través de Agar (Gn 16:2).

    En Gn 21:9, ahora el hijo de Agar, Ismael, se burlaba (ESV: riendo) de Isaac. La burla de Ismael durante el gran banquete fue causada por varias razones: Primero, Ismael fue favorecido por Abraham. Incluso cuando Dios dijo que le daría un hijo a través de Sara, Abraham siguió rogando al Señor por Ismael (Gn 17:16, 17). En segundo lugar, Ismael fue circuncidado por Abraham, una prueba de que estaba incluido en el pacto de Dios (Gn 17:23, 10). Tercero, Ismael era considerado el primogénito de la familia. Similar a las obras de su madre, Ismael se burló de Isaac. El apóstol Pablo en su carta a los Gálatas enfatizó aún más este evento cuando escribió que Ismael persiguió a Isaac (Gl 4:29).

    Ocultar respuesta

  • 6a.

    ¿Por qué se debe despedir a Agar y a Ismael? Desde la perspectiva de Sara;

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Sara no permitiría que el hijo de la sierva fuera heredero con su hijo, es decir, con Isaac (Gn 21:10).

    Ocultar respuesta

  • 6b.

    Desde la perspectiva de Dios;

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Dios le dijo a Abraham: “En Isaac te será llamada descendencia”, no en Ismael (Gn 21:12). En Génesis 17, Dios ya le explicó a Abraham que Él establecería su pacto con Isaac como pacto perpetuo para sus descendientes después de él. Dios no establecería el pacto perpetuo con Ismael (Gn 17:19-21).

    Ocultar respuesta

  • 7.

    ¿Por qué las palabras de Sara le parecieron muy graves a Abraham?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Gn 21:10-11 dice que Abraham estaba preocupado porque Sara quería que se deshiciera de Agar y de Ismael. Esto puso a Abraham en un dilema: si debía o no expulsar a su hijo, Ismael, y a la madre del muchacho, Agar. Ismael era la carne y la sangre de Abraham y lo favorecía (Gn 17:18). Además, mientras esperaba al hijo prometido por Dios, Agar, la sierva, le había dado a Abraham un hijo con quien viviría durante 14 años (Gn 17:25, 21:5). Claramente, expulsar a Ismael y a Agar sería una decisión difícil para Abraham.

    Ocultar respuesta

  • 8a.

    ¿Cómo ven las Escrituras la expulsión de Ismael y de Agar? Véase Gálatas 4:21-31.

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Según la carta de Gálatas, el hijo de la esclava, Agar, nació según la carne, mientras que el hijo de la libre, Sara, nació según la promesa de Dios (Gl 4:22-23). El apóstol Pablo explica que estas cosas son simbólicas y representan los dos pactos. Una da hijos para esclavitud, que es Agar, y la otra da hijos para libertad, que es Sara, la Jerusalén de arriba (Gl 4:24-26). Del mismo modo, hoy, los que nacemos según el Espíritu, somos considerados hijos de la promesa. Ya no somos hijos de la esclava, tampoco hijos según la carne (Gl 4:28-31).

    Ocultar respuesta

  • 8b.

    Para nosotros, ¿cuál es la enseñanza simbólica de la expulsión de Ismael y de Agar?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    La expulsión de Ismael y de Agar como el hijo que nació según la carne y de la esclava, en contraste con Isaac y Sara como el hijo que nació según la promesa y de la mujer libre, era un símbolo de la carne frente al Espíritu (Gl 4:29). También es un símbolo de la ley frente a la gracia de Dios (Gl 5:4).

    El apóstol Pablo, en su carta a los Gálatas, escribe que la Escritura incluso dice: “Echa fuera a la esclava y a su hijo” (Gl 4:30). Estas palabras sirven como amonestación para nosotros que somos nacidos del Espíritu, que no somos hijos de la esclava. Somos hijos de la promesa de Dios y de la mujer libre. Como consecuencia, nosotros que hemos sido llamados a la libertad, no debemos usar tal libertad como una oportunidad para la carne. Porque si seguimos a la carne, el deseo de la carne es contra el Espíritu y estos se oponen entre sí (Gl 5:17). Como hijos de la promesa y de la mujer libre, debemos andar en el Espíritu para no satisfacer más los deseos de la carne (Gl 5:16).

    La expulsión de Ismael y de Agar también nos enseña que los deseos de la carne son una esclavitud para nosotros. Para recibir la herencia del reino de Dios, no podemos seguir viviendo bajo los deseos de la carne. Por lo tanto, al andar en el Espíritu, ya no satisfacemos los deseos de la carne, sino que demostraremos que somos dignos de ser hijos de la promesa que heredarán el reino de Dios.

    Ocultar respuesta

  • 9.

    ¿Qué lección podemos aprender del Ismael circuncidado que fue expulsado al final?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Ismael, aunque nació según la carne y no era el hijo prometido de Dios, el Señor aún lo consideró como hijo de Abraham (Gn 21:13). Cuando Agar huyó de Sara, el ángel del Señor le dijo que volviera y se sometiera a su señora (Gn 16:9). También le dio al hijo el nombre de Ismael porque el Señor había oído la aflicción de Agar (Gn 16:11). Más tarde, al permanecer en la casa de Abraham, Ismael tuvo la oportunidad de ser circuncidado y así entró en el pacto perpetuo de Dios (Gn 17:8, 23).

    Gn 17:7-8 registra el contenido del pacto de la siguiente manera: El Señor será Dios para los descendientes de Abraham y dará toda la tierra de Canaán en heredad perpetua a sus descendientes. Estas fueron las promesas que se le concedieron a Ismael cuando entró en el pacto perpetuo de Dios a través de la circuncisión.

    Pero al final, Agar e Ismael fueron expulsados. Según el libro de Génesis, Ismael se burlaba de Isaac en el gran banquete que ofreció Abraham cuando Isaac creció y fue destetado (Gn 21:8). Además, el apóstol Pablo escribió que Ismael perseguía a Isaac (Gl 4:29). Por la reprensión de Sara, era evidente que Ismael despreció y se negó a reconocer la decisión de Dios de elegir a Isaac como el único heredero de Abraham (Gn 21:10).

    Este evento nos enseña a no tener un concepto elevado de nosotros mismos ni a jactarnos de nuestro estatus. En su carta a los Romanos, el apóstol Pablo advierte a los creyentes que no se jacten de ser “participantes de la raíz y de la rica savia del olivo” (Ro 11:17). Así como a Ismael, el hijo de una sierva, se le concedió ser partícipe del pacto perpetuo de Dios bajo Isaac; nosotros, como olivo silvestre y no la rama natural, fuimos injertados para participar de la raíz y de la rica savia del olivo. El apóstol Pablo agrega también que nosotros, como el olivo silvestre injertado, no sustentamos a la raíz sino que la raíz nos sustenta (Ro 11:18). Por tanto, no debemos ser altivos con nuestra condición de ser hijos de Dios, sino reverenciar con temor (Ro 11:20). El apóstol Pablo continúa advirtiéndonos que si Dios no perdonó a las ramas naturales, tampoco nos perdonará a nosotros (Ro 11:21). Del mismo modo, si Dios no perdonó y echó fuera a Ismael, que era el hijo de Abraham y el circuncidado, Dios tampoco nos perdonará a nosotros, siendo un olivo silvestre injertado. En conclusión, si somos jactanciosos, altivos y no consideramos la severidad del juicio de Dios sobre los que han caído, seremos cortados y no seremos perdonados.

    Ocultar respuesta

  • 10.

    ¿Por qué Dios eligió a Isaac en lugar de Ismael?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    En cuanto a la elección de Isaac sobre Ismael, el apóstol Pablo lo explica claramente en su carta a los Romanos. Él escribe: “Porque no todos los que descienden de Israel son israelitas, ni por ser descendientes de Abraham, son todos hijos suyos, sino: En Isaac te será llamada descendencia. Esto es: no son hijos de Dios los hijos según la carne, sino que son contados como descendencia los hijos según la promesa” (Ro 9:6-8).

    El apóstol Pablo describe además que “el propósito de Dios conforme a la elección permaneciera, no por las obras sino por el que llama… Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia” (Ro 9:11, 16). En otras palabras, la elección de Dios en verdad depende solo de su misericordia. Aunque Ismael nació de la carne y no era el hijo prometido, el Señor con su misericordia aún le concedió injertarse en el pacto perpetuo de Isaac a través de la circuncisión. El establecimiento del pacto perpetuo del Señor con Isaac y la inclusión de Ismael en el pacto de Isaac muestra no solo su misericordia sino también su soberanía.

    Ocultar respuesta

  • 11a.

    ¿Qué le hizo el Señor a Agar durante su momento triste y desesperado? ¿Qué le dijo Dios también acerca de su hijo?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Cuando le faltó a Agar el agua del odre, puso a Ismael debajo de un arbusto. Luego se alejó un poco y se sentó, alzó la voz y lloró, desesperada de que su hijo muriera (Gn 21:15-16). El ángel de Dios le dijo que no temiera y Dios le abrió los ojos y vio una fuente de agua que Él le había provisto (Gn 21:17, 19). Con respecto a Ismael, Dios le ordenó a Agar que se levantara y tomara a Ismael de la mano, porque Dios haría de él una gran nación (Gn 21:18). Aunque el Señor ayudó y proveyó para Agar e Ismael durante su momento de desesperación, a Agar se le dio la responsabilidad de cuidar de Ismael en la presencia del Señor.

    Ocultar respuesta

  • 11b.

    ¿Qué lección podemos aprender de la providencia de Dios en el momento desesperado de Agar e Ismael?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Aunque Agar e Ismael fueron expulsados de la casa de Abraham y no serían herederos con Isaac, el Señor no los abandonó. En su angustia, el ángel del Señor consoló y ayudó a Agar proporcionándoles una fuente de agua tanto a Agar como a su hijo Ismael (Gn 21:19). Dios estaba con el muchacho, el cual creció y habitó en el desierto (Gn 21:20).

    La ayuda y la providencia del Señor probaron que Él fue fiel en guardar el pacto perpetuo con los circuncisos. Aunque Agar e Ismael, el hijo nacido según la carne, fueron expulsados de la casa, el Señor no quebrantó su pacto. Sus acciones mostraron que Él era su Dios, según la promesa del pacto (Gn 17:8). Pero para que Ismael y sus generaciones fueran el pueblo de Dios, por parte de Ismael y sus generaciones tenían que guardar la señal del pacto perpetuo y seguir las pisadas de la fe que tuvo Abraham (Ro 4:12).

    Por lo tanto, la providencia de Dios para Agar e Ismael en su momento desesperado nos enseña que Dios siempre es fiel en cumplir su promesa. Si bien el Señor no quebrantará su propio pacto, nosotros también tenemos la responsabilidad de guardar el pacto perpetuo a través de la circuncisión. Más adelante en el Nuevo Testamento, el apóstol Pablo explica más sobre el significado de la circuncisión. Según el apóstol Pablo, la verdadera circuncisión es la circuncisión del corazón en espíritu (Ro 2:29). Hoy, al guardar los mandamientos del Señor y seguir los pasos de fe de nuestros antepasados ​​en nuestra vida diaria, estamos haciendo la señal de la circuncisión del pacto perpetuo de Dios.

    Ocultar respuesta

  • 11c.

    ¿Qué aprendemos del mandato del ángel de Dios a Agar con respecto a Ismael en Gn 21:18?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    El ángel de Dios le dijo a Agar que se levantara y tomara a Ismael de la mano, porque Dios haría de él una gran nación (Gn 21:18). De las palabras del ángel del Señor podemos aprender varias cosas: Primero, como padres, tenemos la responsabilidad de criar a nuestros hijos delante de Dios. En su carta a los Efesios, el apóstol Pablo amonestó a los creyentes a criar a sus hijos en disciplina y amonestación del Señor (Ef 6:4). No solo debemos nutrir a nuestros hijos físicamente, sino también amonestarlos en el camino del Señor. Segundo, el Señor tiene un plan para nuestros hijos. Agar debía nutrir a Ismael porque el Señor haría de él una gran nación. Del mismo modo, tenemos la responsabilidad de guiar a nuestros hijos porque son herencia del Señor (Sal 127:3). David oró para que sus hijos “sean como plantas crecidas en su juventud” y sus hijas “como esquinas labradas cual las de un palacio” (Sal 144:12). Nuestro deber de nutrir y guiar a nuestros hijos tiene el propósito de prepararles el camino para que se conviertan en vasos útiles de acuerdo con el plan de Dios.

    Ocultar respuesta

  • 21:22-34

    12a.

    ¿Cuál es el contenido del pacto entre Abimelec y Abraham? ¿Por qué Abimelec le pidió a Abraham que no lo engañara?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Abimelec quería que Abraham jurara por Dios que no haría mal a él, a su descendencia ni a su posteridad, sino que conforme a la bondad que Abimelec había tenido con Abraham, él haría con Abimelec y con la tierra en la que había habitado (Gn 21:23).

    Abimelec insistió en que Abraham jurara por Dios que no lo trataría con falsedad debido a que Abraham había tratado previamente con falsedad a Abimelec con respecto a Sara (Gn 20). Abraham le había mentido a Abimelec que Sara era su hermana, no una mujer casada, y por eso Abimelec la tomó como mujer (Gn 20:2). Por tal mentira y gran pecado, casi le costó la vida a Abimelec y todo su reino (Gn 20:7, 9). Por lo tanto, esta vez, Abimelec quería asegurarse de que Abraham no volviera a cometer un pecado tan grande hacia él.

    Ocultar respuesta

  • 12b.

    Comparta un momento en su vida donde otros tuvieron que ser cautelosos con usted debido al error que cometió anteriormente.

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta
    (La respuesta está vacía)
    Ocultar respuesta

  • 13.

    Aparte de Abraham, ¿quién más tuvo una relación personal con el Señor en Beerseba? ¿Cuál fue el significado y la similitud de cada evento?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    En Beerseba, Abraham plantó un tamarisco e invocó allí el nombre del Señor (Gn 21:33). En Gn 26:25, cuando Isaac fue a Beerseba, edificó allí un altar e invocó el nombre de Señor, como lo hizo su padre. Luego, en Gn 46:1, después de que Israel llegó a Beerseba, ofreció sacrificios al Dios de su padre Isaac. Los tres construyeron su relación personal con el Señor en Beerseba.

    Invocaron el nombre del Señor porque experimentaron la paz y el consuelo del Señor. Para Abraham, él invocó el nombre del Señor después de que se le dio un pozo en paz a través de un pacto con Abimelec en la tierra de los filisteos (Gn 21:25-34). Para Isaac, él invocó el nombre del Señor después de que Dios se le apareció y lo consoló (Gn 26:23-25). Finalmente, para Israel, él ofreció sacrificios a Dios y luego Dios le habló a través de una visión, dándole consuelo y la promesa de guiar sus caminos (Gn 46:1-4).

    Ocultar respuesta

  • 14.

    ¿Por qué Abraham hizo un pacto con Abimelec? ¿Cuál fue su significado en relación con la promesa de Dios en Gn 17:8?

    •  
    •  
    •  
    •  
    Mostrar respuesta

    Abraham hizo un pacto con Abimelec usando siete corderas como testimonio de que él había cavado el pozo que fue tomado por los siervos de Abimelec (Gn 21:25-31). En otras palabras, el pacto tenía por objetivo reclamar el pozo que había cavado. Aunque Abraham vivió un estilo de vida nómada, su acción de reclamar el pozo a través de un pacto reflejó su fe en la promesa de Dios.

    En Gn 17:8, el Señor le dijo a Abraham que le daría la tierra de Canaán en heredad perpetua, la tierra en la que él fue un forastero. Anteriormente, en Gn 13:17, Dios ya había prometido a Abraham que le daría la tierra por la que él había recorrido a lo largo y a lo ancho. Así, cuando Abraham se mudó de un lugar a otro, habitó en la tierra de los filisteos por muchos días (Gn 21:34), y reclamó el pozo para sí mismo; tales actos eran para probar su creencia en la promesa de Dios: que la tierra de Canaán era suya según la longitud y la anchura que había recorrido.

    Ocultar respuesta