Contexto

Ninguna otra epístola inicia con tal fuerza. Después de un breve saludo, Pablo de inmediato confronta el problema que enfrentan los gálatas y denuncia a los predicadores del falso evangelio.

Versículo clave

(1:8)

¿Sabía usted que...?

Galacia (1:2): “El término aparece tres veces en el Nuevo Testamento. En 2 Ti 4:10, la referencia es incierta. En 1 Pe 1:1, se refiere a la zona norte de Asia Menor, ocupada por los galos. Aquí, Pablo probablemente usa el término para referirse a la provincia romana de Galacia y a un área adicional en el sur, lugar por el que viajó en su primer viaje misionero (Hch 13:14-14:23)”. [ref]

Esquema

  • Saludo
  • Anatema a los que pervierten el evangelio

Análisis del segmento

  • 1:1-5

    1.

    Pablo, no siendo uno de los doce apóstoles originales, ¿por qué se llamó a sí mismo apóstol?

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    Según Pablo, él era apóstol debido a que fue llamado por Jesucristo y Dios Padre (1) para predicar el evangelio entre los gentiles (16). Aunque nunca estuvo con el Señor Jesús durante su ministerio terrenal, él vio al Señor resucitado al igual que los otros apóstoles (1 Co 9:1, 15:1-8). Al momento de la conversión de Pablo, Cristo le reveló que lo había llamado para ser su testigo (Hch 9:10-16, 26:15-18). Por esto, Pablo en sus epístolas declaró que había sido llamado a ser apóstol (Ro 1:1)(1 Co 1:1). Esta era la misma misión confiada a los doce (Hch 1:21-22). En resumen, el claro llamado del Señor y la misión de ser testigo de Cristo lo calificaron como uno de los apóstoles. Su apostolado fue confirmado en los escritos de Lucas (Hch 14:4, 14).

    El Señor mismo también confirmó el apostolado de Pablo. Fue sobre esta base que Pablo prosiguió la defensa de su apostolado en 2 Corintios. Él consideraba a los creyentes corintios como evidencia viva de que él era un ministro del evangelio (2 Co 3:1-3). También citó las pruebas de un apóstol de Dios a través de señales, milagros y maravillas (2 Co 12:11-12). Debido a todas las maravillosas obras de Dios a través de Pablo, fue evidente que el Señor lo llamó a ser su apóstol.

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  • 2.

    ¿Por qué Pablo enfatiza el origen divino de su apostolado?

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    Los judaizantes intentaron desacreditar el verdadero evangelio que Pablo había predicado, afirmando que Pablo no era un genuino apóstol. En respuesta, Pablo reforzó el mensaje del verdadero evangelio, declarando que había sido Dios, no cualquier ser humano, quien le había designado como apóstol. Por esta razón, cualquier otro evangelio distinto al que había predicado sería falso.

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  • 3.

    ¿Cómo es distinta la introducción en esta carta a los saludos en otras epístolas de Pablo? ¿Por qué?

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    En lugar de elogios y bendiciones, que son comunes en las otras epístolas de Pablo, aquí se dirige directamente al meollo del asunto luego de una breve bendición. Desde el versículo 1, Pablo defiende su llamado apostólico.

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  • 4.

    ¿Qué doctrina fundamental cristiana se halla en el versículo 4?

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    Salvación mediante la expiación de Cristo según el plan de redención de Dios.

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  • 5.

    ¿Qué significa que el Señor Jesucristo nos libra del presente siglo malo?

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    A través de la gracia salvadora y el poder de Dios, los creyentes han sido liberados de la corrupción del mundo, para ser participantes de la naturaleza divina (2 Pe 1:2-4). Hemos sido liberados de la esclavitud del pecado que controla la vida de los incrédulos, y se nos dado una vida nueva en Cristo (1 Jn 5:18-19). También tenemos la esperanza de ser librados de toda maldad y preservados para el reino celestial (2 Ti 4:18).

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  • 1:6-10

    6a.

    ¿Qué indicios ve en este párrafo que muestran la gran urgencia de Pablo?

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    1. El uso de un lenguaje fuerte, como “asombrado, “tan pronto”, “sea anatema”. 
    2. La repetición de la advertencia y la maldición en los versículos 8 y 9.
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  • 6b.

    ¿Cuál es el motivo para tal urgencia?

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    Al ver que los gálatas estaban a punto de alejarse de la gracia de Cristo, Pablo tuvo que tomar medidas drásticas para despertarlos del engaño del falso evangelio.

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  • 7a.

    ¿Cuál es el “evangelio diferente” que extravió a los gálatas?

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    Con base en la defensa del evangelio de Pablo, en Gálatas y también en Hechos (Hch 15:1), podemos inferir que el falso evangelio que había desviado a los gálatas promovía la salvación por las obras de la ley, incluyendo la circuncisión.

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  • 7b.

    ¿Cómo este otro evangelio desviaba del verdadero?

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    Mientras el falso evangelio aparentaba ser una ligera variación del verdadero (porque no negaba la obra salvadora de Cristo, sino que añadía la necesidad de las obras a la fe), en realidad había socavado el rol de Cristo en la salvación. La perversión era tan seria que, en esencia, había anulado por completo la necesidad de la expiación de Cristo (cf. 2:21).

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  • 8.

    ¿Cómo llamó Pablo a los predicadores del falso evangelio? (7; cf. 5:10, 12)? ¿Por qué?

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    “Los que os perturban”. Habían quitado la libertad de los creyentes en Cristo y les habían puesto bajo la esclavitud de la ley.

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  • 9.

    ¿Por qué es maldecido el que predica otros evangelios?

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    Es tan grande el efecto del falso evangelio, que quienes lo aceptaron, se alejaron de la gracia de Dios (1:6, 5:4). Por ello, cualquiera que proclame dicho mensaje, es culpable de conducir a la gente a la destrucción y merece la condenación.

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  • 10.

    En el versículo 8, Pablo no se excluye a sí de la maldición en caso de predicar un evangelio distinto (“si aun nosotros…”). ¿Qué indica esto respecto a la naturaleza del verdadero evangelio?

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    El verdadero evangelio no se origina ni depende de ningún individuo, incluyendo el predicador. Incluso si al final el predicador se aparta de la verdad y predica un evangelio diferente, el mismo será maldito. Por tanto, nuestra fe no debe basarse en hombres, sino únicamente en Cristo. El hombre cambia, pero la palabra de Dios permanece para siempre.

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  • 11.

    ¿Alguna vez se ha encontrado con un “evangelio diferente”? ¿Cuál era el mensaje del mismo?

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  • 12.

    ¿Cómo sabe cuál es el verdadero evangelio?

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    El verdadero evangelio se nos revela por las Escrituras. Fue declarado primero por el Señor y nos lo llegó por los apóstoles y profetas (Ef 2:19-20). Este evangelio también es confirmado por el Señor a través de señales, prodigios, diversos milagros y dones del Espíritu Santo (Heb 2:3-4).

    Ante esto, para conocer si el mensaje del evangelio que hemos recibido es del Señor, debemos ver si está completo e incluye las enseñanzas del Señor y de los apóstoles, y si el Señor confirma el mensaje del evangelio como lo hizo con la iglesia apostólica, mediante el derramamiento del Espíritu Santo prometido y por señales, prodigios y milagros.

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  • 13.

    ¿Cómo la insistencia de Pablo de un solo evangelio verdadero confirma la enseñanza de una sola iglesia verdadera?

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    Pablo no permitió que predicaran otro evangelio en la iglesia, debido a que el cuerpo de Cristo comparte una sola fe (Ef 4:5). Por ello, los individuos o las congregaciones que proclaman un evangelio diferente al que predicaron los apóstoles, no pueden ser parte del cuerpo de Cristo.

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  • 14a.

    Pablo nos recuerda una actitud importante en el versículo 10. ¿Cuál es esta actitud y por qué es necesaria para los siervos de Cristo?

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    Como ministros de Cristo, servimos a Dios, no a los hombres. Nuestra meta debe ser agradar a nuestro Amo, a quien rendiremos cuentas (2 Co 5:9-10). Debemos ser fieles en cumplir la palabra de Dios, aun si al hacerlo vamos en contra de la opinión humana.

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  • 14b.

    ¿De qué forma a veces agrada a los hombres en vez de a Dios?

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  • 14c.

    ¿Cómo resuelve la contradicción aparente entre este verso y Ro 15:2 y 1 Co 10:33? ¿En qué situaciones hemos de agradar al hombre? ¿En qué situaciones no hemos de agradar al hombre?

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    La Escritura nos enseña a agradar a nuestros vecinos o hermanos para salvarlos y fortalecer su fe. Pero esto no significa ser transigente respecto a la palabra de Dios con tal de agradar a los hombres. Lo que nos manda es restringir nuestra libertad personal y tener más empatía ante las necesidades de otros (cf. Ro 14:20-21)(1 Co 8:1, 9-13, 9:19-23). Pero cuando agradar a otros involucra acciones contrarias a las enseñanzas bíblicas, debemos siempre elegir agradar a Dios y no a los hombres.

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