Contexto

La iglesia en Jerusalén había superado con éxito la primera ola de oposiciones. En este pasaje, Lucas nos provee un reporte de la gracia y el poder del Señor en la iglesia, así como el amor y la unidad de los creyentes. Pero Satanás halló puertas al corazón de unos pocos infieles e intentó corromper a la iglesia a través de su engaño. Pero Dios intervino prontamente y decisivamente para remover la maldad dentro de la iglesia. Como resultado, el temor del Señor vino sobre todos en la iglesia, en especial sobre los que oyeron el juicio divino. El Señor continuó manifestando su gran poder y los creyentes continuaron creciendo en número.

Versículo clave

(4:32, 5:4)

¿Sabía usted que...?

1. Levita (4:36): El Señor había instruido a los israelitas que los levitas no tuvieran herencia (Dt 18:1). Hay posibles razones por las que Bernabé era dueño de un campo: 1) La regulación respecto a los levitas podía haberse aplicado únicamente dentro del territorio de Palestina, y posiblemente la tierra de su posesión estaba en Chipre. 2) Pudo haber estado casado, y quizás la tierra vendida pudo haber sido propiedad de su esposa. 3) Probablemente la prohibición de que los levitas poseyeran tierras ya no se aplicaba. [ref]
2. Chipre (4:36) es una isla en la parte este del Mar Mediterráneo.
3. “Sustrajo parte del precio” (5:2): Este verbo, nosphizo, es el mismo verbo usado en la Septuaginta (traducción griega temprana de las Escrituras Hebreas) para el acto de robo de Acán.

Esquema

  • El compartir de las posesiones
  • Ananías y Safira
  • Señales y maravillas por la mano de los apóstoles

Análisis general

  • 1.

    ¿Cuáles son las similitudes entre este pasaje y Hch 2:40-47?

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    1. Los creyentes compartían sus bienes con los necesitados.
    2. Los creyentes eran añadidos a la iglesia.
    3. Los creyentes estaban en mutuo acuerdo.
    4. Se hicieron grandes señales y prodigios por la mano de los apóstoles, y el temor sobrevino a todos.

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  • 2.

    ¿Por qué cree que Lucas repetidamente reporta sobre la vida de los creyentes en la iglesia?

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    El crecimiento de la iglesia es más que un aumento en la membresía. Una iglesia próspera se marca por la vida de los creyentes centrada en Cristo. Al obedecer los creyentes la voluntad del Señor en su vida diaria, la iglesia estará acompañada de la presencia del Espíritu Santo y continuará recibiendo las bendiciones de Dios.

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Análisis del segmento

  • 4:32-37

    1a.

    ¿Cómo las vidas de los creyentes mostraban que ellos eran “de un solo corazón y un alma”?

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    Los creyentes no consideraban sus posesiones como propias, sino que las compartían entre ellos para que nada le faltara a nadie.

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  • 1b.

    Basado en este registro, ¿cuáles cree que son los pre-requisitos para la unidad entre los creyentes?

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    1. Para alcanzar la unidad, es importante renunciar al estilo de vida egocéntrico y cuidar de las necesidades de otros miembros del cuerpo de Cristo.
    2. La unidad de la iglesia es en esencia la unidad de corazón y alma. La unidad superficial, como formar equipos de trabajo u organizar reuniones sin tener el mismo corazón de amor y dedicación, no perdurará. Para que la iglesia sea verdaderamente una, todos deben tener un corazón sincero y la voluntad de cuidar a los demás miembros, buscando el bien común del cuerpo de Cristo.

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  • 2.

    ¿Cómo debería la iglesia de hoy practicar el compartir de las posesiones para cuidar a los necesitados?

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    Cada creyente ha de estar listo para dar. Esto requiere que no consideremos las posesiones como nuestras, sino que nos veamos como administradores de las cosas de Dios. Además, hemos de aprender a cuidar de los demás para saber quién está en necesidad. Al saber que alguien está necesitado, podemos generosamente dar nuestras posesiones a ellos. 
    Aquellos que han sido elegidos para administrar los asuntos de la iglesia también deben estar atentos ante cualquier miembro en necesidad. Al ver una necesidad, pueden usar fiel y sabiamente los fondos disponibles para que la iglesia ayude a esos miembros.

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  • 5:1-16

    3a.

    ¿Estuvo mal que Ananías y Safira se quedaran con parte del dinero de la venta de su propiedad? ¿A causa de qué pecado fueron castigados ellos?

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    Pedro señaló claramente que Ananías tenía el control total de la propiedad y el dinero por la venta de la misma (4). No había nada de malo en quedarse con parte del dinero mientras ofrecían el resto a la iglesia. Pero el pecado de Ananías fue la conspiración con su esposa para engañar a los apóstoles y a la iglesia con la mentira de que habían dado todo el dinero de la venta a la iglesia.

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  • 3b.

    ¿Qué pudo haber motivado a Ananías y Safira a hacer lo que hicieron?

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    Lo que Bernabé hizo de vender su tierra y dar el dinero a la iglesia fue un acto noble. El hecho de que esto fuera registrado muestra que era algo bien conocido por todos los creyentes. Ananías y Safira probablemente querían que los demás los reconocieran a través de dar dinero a la iglesia. Ellos planearon la estrategia para crear una apariencia de generosidad sin sacrificar mucho. En otras palabras, su motivación de dar era para ganar el elogio de la gente, y no para ayudar a los necesitados. Estaban usando la caridad cristiana a su propio beneficio.

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  • 4a.

    Según su opinión, ¿por qué el castigo fue tan severo y rápido por el pecado cometido? ¿Fue justificable el castigo?

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    Este pasaje con frecuencia alarma al lector y le plantea la pregunta de si el pecado de Ananías y Safira justificaba un juicio tan drástico de parte de Dios. Si pensáramos que Dios estaba actuando con mucha dureza contra un pecado “menor”, entonces necesitamos reexaminar la naturaleza del pecado y también la justicia de Dios.
    El pecar a propósito, sin importar lo inofensivo que parezca, es una rebelión contra Dios. A la vista de esto, cuando pecamos, cometemos el pecado de traición contra nuestro creador, y la consecuencia justa de nuestra acción es la muerte o la separación de la vida de Dios. No hay pecado que sea demasiado pequeño que no merezca esto. Todo pecado contra Dios es una ofensa de tamaño cósmico. 
    Con esto en mente, cuando leemos el recuento de Ananías y Safira, no debemos sorprendernos de cuán inmediato o severo fue el castigo de Dios sobre ellos. Sino que debemos maravillarnos de lo misericordioso que ha sido Dios con nosotros y cuánto hemos dado por sentado su gracia. Esta narración debe conducirnos al arrepentimiento cada vez que la leamos.
    Tampoco tomemos a la ligera el pecado de engañar a Dios, porque Dios no puede ser burlado (Gl 6:7). Ananías y Safira declararon por su conducta que habían dado todo el dinero a Dios. Así que aún la porción que habían retenido ya no les pertenecía. El tratar de robar lo que ha sido dedicado para Dios de ninguna manera es una ofensa “menor”. 
    En cuanto a por qué no se les dio una segunda oportunidad a Ananías y Safira, no debemos apresurarnos a concluir que nunca tuvieron la oportunidad de arrepentirse de sus pecados. No tenemos suficiente información de la vida de esta pareja, ni los posibles eventos que precedieron al incidente. También debemos recordar que la obra del Espíritu Santo era muy poderosa en los primeros días de la iglesia. Con el Espíritu Santo viviendo en ellos, con certeza se les habría enseñado lo que era correcto e incorrecto, y quizás habrían sido advertidos por el Espíritu para evitar el pecado. Pero ellos dejaron que Satanás llenara sus corazones y conspiraron para “mentir a Dios” (4) y “tentar al Espíritu del Señor” (9).
    La muerte de Ananías y Safira no solo fue justa, sino que también sirvió para un propósito mayor. A través de este evento, Dios enseñó a todos, incluyendo los cristianos de hoy, la importante lección de la seriedad del pecado, así como el hecho de que Dios conoce todos los motivos de nuestros corazones a profundidad. El juicio decisivo de Dios preservó la pureza de la iglesia en su fase inicial de crecimiento e impidió a muchos cometer tales actos corruptos. 

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  • 4b.

    ¿Cuál cree que hubiera sido la consecuencia si el pecado de Ananías y Safira hubiera quedado impune?

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  • 5.

    ¿Qué impacto trajo este evento?

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    El temor cayó sobre toda la iglesia y sobre los que oyeron estas cosas (11). El resultado indirecto fue que el Señor continuó bendiciendo a la iglesia, obrando con los apóstoles y añadiendo creyentes a la iglesia (12-16). Incluso gente de las ciudades vecinas vino a Jerusalén para experimentar el poder sanador y la gracia del Señor Jesús.

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  • 6.

    ¿Qué significa “mentir a Dios” o “tentar al Espíritu del Señor”?

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    Mentir a Dios o tentar al Espíritu del Señor significa tratar de engañar a Dios con un falso acto de piedad, como el de ofrendar a Dios con un motivo oculto como en el caso de Ananías y Safira. De forma similar, los israelitas también mintieron a Dios a través de decir palabras dulces al oído pero sin ninguna intención de obedecerlo (Sal 78:36; Is 57:11; Os 11:12).

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  • 7.

    ¿Qué lecciones aprendió de este evento en los aspectos de a. Ofrendas y obras de caridad b. Mentir a Dios y tentar al Espíritu del Señor c. La obra de Satanás d. El crecimiento de la iglesia?

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    a. Hemos de considerar las ofrendas y las buenas obras de caridad como algo dedicado para el Señor. Dado que se hace para Dios, no debe ser para nuestro beneficio propio. Debe hacerse únicamente por amor a Dios y a los necesitados. No debemos utilizar las buenas obras para ganar respeto, admiración u otra recompensa humana. Tal como el Señor nos enseñó, no debemos realizar nuestros actos de piedad para ser vistos por los hombres (Mt 6:1-18). El hombre ve las apariencias, pero Dios ve el motivo detrás de las acciones. 
    b. Dios detesta la falsa piedad, tanto como al que peca deliberadamente. Podemos engañar a los hombres, pero nunca a Dios. Aunque Él a veces no juzga de inmediato el pecado oculto como en el caso de Ananías y Safira, no obstante es de su conocimiento el pecado de cada uno. A pesar de todo, tendremos que dar cuentas a Dios.
    c. La obra de Satanás puede presentarse externamente en forma de oposición a la fe o al mensaje del evangelio. Pero también puede trabajar desde dentro de la iglesia a través de aquellos que le obedecen. Él inicia su obra llenando el corazón de una persona, incluso el corazón de un creyente, para lograr su propósito maligno. Al hacerlo, destruye a la persona que usa y daña el bienestar espiritual de la iglesia. Por eso, debemos cuidar nuestros corazones y proteger nuestra iglesia contra la infiltración de Satanás. 
    d. Si los pecadores no son reprendidos y los pecados no son removidos, puede que el crecimiento de la iglesia sea estorbado. Aún peor, la iglesia puede ser corrompida, dado que el pecado puede esparcirse como levadura (1 Co 5:6). Si alguien peca y la iglesia no toma ninguna medida, otros pueden seguir el ejemplo. Pero si la iglesia detiene la propagación del pecado condenando el pecado, o si el Señor interviene enviando juicio inmediato, el temor del Señor vendrá sobre todos. Así la iglesia puede conservar su integridad y continuar creciendo bajo la bendición de Dios. 

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  • 8.

    Según los versículos 13 y 14, las señales y los milagros a través de los apóstoles produjeron dos clases de respuestas en quienes los vieron. ¿Por qué las reacciones fueron tan diferentes?

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    Hubo dos clases de respuesta ante las señales y los milagros hechos por Dios. Algunos no se atrevieron a unirse a la iglesia (13). Pero algunos llegaron a creer en el Señor (14). Esto coincide con la enseñanza del Señor Jesús en Juan 3:19-21. Cuando brilla la luz del evangelio en las tinieblas de este mundo, quienes aman el pecado evitarán la luz por temor a que sean expuestas sus obras malignas, pero quienes se someten a la verdad y se arrepienten de sus pecados, vendrán a la luz y serán salvos.

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