Contexto

Los primeros lectores de la carta de Pedro fueron peregrinos en la diáspora (1:1). Como forasteros en tierras extranjeras, estaban atravesando por diversas pruebas (1:6). La carta de Pedro está llena de aliento para ellos. Inicia la carta proveyendo certeza sobre la identidad del creyente como elegidos de Dios, y de la gran salvación que han recibido.

Versículo clave

(1:5)

¿Sabía usted que...?

  1. Apóstol (1:1) significa  “mensajero”.
  2. Dispersión (1:1): la dispersión de los judíos entre los gentiles después del cautiverio de Babilonia.

Esquema

  • Saludo
  • Alabanza a Dios por la salvación
  • Gozo y esperanza en las pruebas
  • Profecía de la salvación

Análisis del segmento

  • 1:1-2

    1.

    ¿Cómo Pedro identifica a los creyentes?

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    Vea el versículo 2.

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  • 2.

    ¿Qué dice Pedro respecto a la elección de Dios según lo siguiente? Explique brevemente el significado de cada uno: a. Dios el Padre b. El Espíritu c. Jesucristo

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    a. Somos escogidos según la presciencia de Dios el Padre. Dios nos ha escogido según su soberana voluntad y ha preparado nuestra salvación desde antes de la fundación del mundo (1:20; 2 Tes 2:13; Ro 8:29).

    b. Somos elegidos en santificación del Espíritu. La palabra “santificar” significa  “separar y dedicar para Dios” o “purificar”. El Espíritu Santo nos aparta al testificar que somos hijos de Dios (Ro 8:15-16; Gl 4:6), sellándonos para la herencia celestial (2 Co 1:21-22, 5:1-5; Ef 1:13-14), haciéndonos el templo de Dios (1 Co. 6:19; Ef. 2:22), y dedicándonos a Dios como ofrenda agradable (Ro 15:16). Él también obra en nuestras vidas para la salvación, transformándonos a la imagen de Dios (1 Co 6:11)(2 Tes 2:13; Ez 36:25-27; Ro 8:9-11).

    c. Somos elegidos para obediencia y por el rociado de la sangre de Cristo. Dios nos ha llamado a obedecer al Señor Jesucristo (Mt 28:18-20; cf. 2 Co 10:5; Ro 1:5; Heb 5:9). Él nos ha dado a su Hijo Jesucristo, para expiar nuestros pecados por su sangre (Ro 3:25, 5:9; Ef 1:7; Col 1:13-14; Heb 9:14; Ap 5:9).

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  • 1:3-5

    3a.

    ¿Qué significa “renacer para una esperanza viva”?

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    El nuevo nacimiento que Dios nos ha dado es el renacimiento espiritual por el agua y el Espíritu (Jn 3:5; Tit 3:5-7). Estuvimos muertos en nuestras transgresiones, pero Dios nos ha vivificado por el perdón de nuestros pecados (Ef 1:7, 2:5). Habiendo sido salvos por gracia, ahora poseemos la esperanza de la vida eterna (Tit 1:2, 3:7).

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  • 3b.

    ¿Cómo fue posible renacer para una esperanza viva?

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    Renacer para una esperanza viva es posible gracias a la resurrección de Jesucristo de entre los muertos (3). El Señor Jesús declaró que Él tenía el poder para entregar su vida y el poder para tomarla de nuevo (Jn 10:17-18). Y así fue, luego de ser crucificado y sepultado por nuestros pecados, Él resucitó al tercer día. Debido a que Cristo venció el pecado y la muerte a través de su resurrección, los que estamos en Cristo podemos ser justificados y nacer de nuevo (Ro 4:25; Col 2:12). Por la resurrección de Cristo, también tenemos la esperanza de ser levantados de entre los muertos (1 Co 15:20-22).

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  • 4a.

    ¿Qué nos dicen los versículos 3 y 4 acerca de lo que esperamos recibir pero que aún no hemos recibido?

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    Esperamos la herencia celestial reservada para nosotros y la salvación que se nos revelará en el último tiempo.

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  • 4b.

    ¿Por qué enfatiza Pedro el aspecto futuro de la salvación en estos versículos?

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    Pedro quiere que los creyentes recuerden la esperanza que tienen en Cristo. La fe no está limitada al presente, sino cree lo que espera en el futuro (Ro 8:24). Pese a los sufrimientos temporales presentes, hay una herencia gloriosa aguardando. Aunque ellos no han recibido la promesa, Dios reserva una herencia para ellos, y los guarda con su poder.

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  • 4c.

    ¿Qué aspecto de la salvación se revelará en el tiempo final?

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    Glorificación, resurrección, transformación, vida eterna con Dios (1 Tes 4:16-17; Ro 8:18-25; Flp 3:21-22)(1 Jn. 3:2; Ap 21:3-4).

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  • 5a.

    El versículo 5 dice que somos guardados por el poder de Dios. ¿De qué se nos guarda?

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    Debido a que aún estamos en este mundo, Satanás constantemente trata de dañar nuestra alma. Pero el poder de Dios es capaz de guardarnos y apartarnos de la mano del maligno para que no nos desviemos (Jn 17:11-15; Ro 8:33-39; Jud 1:24).

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  • 5b.

    Respecto a la protección de Dios, ¿qué papel jugamos?

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    Debemos depender del poder protector de Dios a través de la fe (1 Pe 1:5). Siempre que busquemos el crecimiento espiritual y la misericordia en el Señor, el diablo no podrá hacernos daño (cf. Jud 1:20-21).

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  • 6.

    ¿Cómo nos ayuda en nuestro andar cristiano enfocarnos en la herencia que Dios nos ha preparado?

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    1. Mirar hacia la herencia celestial nos recuerda que como peregrinos en este mundo, no debemos enfocar nuestras mentes en las ganancias materiales de esta vida temporal. 
    2. Esperar la herencia celestial nos permite regocijarnos en los sufrimientos.
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  • 1:6-9

    7.

    ¿Cómo las pruebas pulen y sacan a relucir lo genuino de nuestra fe?

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    Las pruebas nos permiten percatarnos de cómo está nuestra fe a un nivel más profundo y aprender a depender de Dios. También nos desarrolla la persistencia para estar firmes en el Señor. Al experimentar el amor y el poder de Dios en nuestras pruebas, nuestra fe se fortalece a través de conocer mejor a Dios.

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  • 8a.

    Según Pedro, ¿qué provee el gozo?

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    Fe en Jesucristo y su salvación, creyendo a quien aún no hemos visto (3-6, 8-9).

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  • 8b.

    En su vida, ¿experimenta gozo inexpresable y glorioso? De no ser así, ¿cómo puede obtenerlo?

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  • 9a.

    ¿Cuál es la expresión concreta de nuestra fe en Cristo?

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    La fe en Cristo se expresa amando a Cristo (8). Este amor se manifiesta cuando obedecemos sus mandamientos (Jn 14:15).

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  • 9b.

    ¿Cuál es el resultado de tal fe?

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    La salvación de nuestras almas (9).

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  • 1:10-12

    10.

    ¿Qué tenemos hoy que los profetas de la antigüedad buscaron diligentemente conocer?

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    Tenemos el evangelio de salvación (12). Mientras que los profetas del pasado vivieron bajo la ley y esperaban ansiosamente la venida del Salvador, ahora somos justificados gratuitamente por la gracia de Dios mediante el sacrificio de Cristo.

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  • 11.

    ¿Cuál es el mensaje de este párrafo?

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    La salvación que hemos recibido es tan grande, que todos los profetas en el pasado inquirieron y buscaron con esmero. Aun los ángeles deseaban conocerla. Esta salvación es la noticia más grandiosa para el mundo, y somos verdaderamente bendecidos al haber recibido esta maravillosa gracia de Dios.

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