Contexto

En un esfuerzo por exponer el error de la división entre los creyentes de Corinto, Pablo puso en contraste la sabiduría de este mundo y el poder de la cruz de Cristo. Fue de agrado para Dios salvar a los creyentes a través de lo que la gente de este mundo parece locura. Ahora, Pablo continúa con el tema de la sabiduría de Dios en la salvación. Como es evidente en el propio llamado de los creyentes y en la predicación de Pablo, la salvación a través de Jesucristo no se basa en la sabiduría humana. La sabiduría del evangelio es una sabiduría en misterio y oculta de Dios, desconocida para aquellos que son sabios según los estándares mundanos. Pero Dios ha revelado esta sabiduría a los creyentes a través del Espíritu.

Versículo clave

(2:12)

¿Sabía usted que...?

1. “Demostración” (2:4): La palabra griega se define como “señalar algo con el propósito de demostración”. ^[ref]
2. La palabra griega para “discernir” en 2:14 es la misma palabra para “juzga” y “juzgado” en 2:15.

Esquema

• Sabiduría de la elección de Dios en Cristo
  (1:26–31)
• Predicación que no está fundada en la sabiduría humana
  (2:1-5)
• Revelación de la sabiduría de Dios a través del Espíritu
  (2:6–16)

Palabras/frases claves

débil, Espíritu/espiritual, fuerte, gloriar, hombres/humana, locura, mundo, palabra, palabra(s), poder, sabiduría/sabios

Análisis general

• 1.	Identifique en este pasaje las cosas que este mundo valora.         Mostrar respuesta Poder e influencia (1:26); estar en una clase social alta (1:26); palabras persuasivas y palabras de sabiduría (2:1, 4, 13). Ocultar respuesta

Análisis del segmento

• 1:26–31

  1.

  ¿Cuál es el propósito de Pablo al pedirles a los Corintios que consideren su llamado?         Mostrar respuesta Pablo les recuerda a los creyentes que Dios no los escogió en base a las cosas que el mundo valora. Al contrario, Dios había elegido para su reino a los débiles, los necios y los innobles del mundo (cf. Sant 2:5). Recordando la naturaleza de su propio llamado podría ayudarlos a ver la drástica diferencia entre cómo Dios y los hombres juzgan las cosas. Por lo tanto, los creyentes más aún deberían evitar la división basada en valores seculares. Ocultar respuesta

• 2.	¿Por qué Dios avergüenza a los fuertes y deshace lo que es?         Mostrar respuesta “Para que nadie se jacte en la presencia de Dios” (1:29). Ocultar respuesta

• 3.

  Explique qué significa que Cristo Jesús nos ha sido hecho por Dios sabiduría.         Mostrar respuesta Desde la perspectiva del hombre, nosotros, los que hemos sido llamados, podemos ser débiles, necios e innobles. Sin embargo, Dios nos ha dado a los creyentes nuestro Señor Jesucristo y su don de la vida eterna, algo de mucho mayor valor. Por eso, nos gloriamos en la cruz de Cristo aunque el mundo la desprecie. Por la misma razón, Pablo considera todo como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, nuestro Señor (Flp 3:7-8). Ocultar respuesta

• 4.

  ¿Qué aprendemos de este segmento acerca de cómo Dios y los hombres ven las cosas de manera muy diferente?         Mostrar respuesta La gente de este mundo se jacta de sí misma, particularmente de las cosas que posee. Pero Dios escoge lo débil, lo vil y lo menospreciado del mundo, es decir, “lo que no es” (1:28). Dios se opone a los soberbios pero da gracia a los humildes (1 Pe 5:5; Sant 4:6, 10; Pr 3:34). Ocultar respuesta

• 2:1–5

  5.	¿De qué manera el cambio a la primera persona (“Yo”) en este segmento indica un cambio en el contenido?         Mostrar respuesta Pablo ahora cambia su enfoque a su predicación. Mostrará que su predicación, como el llamado de los Corintios, no se basa en lo que el mundo valora. Ocultar respuesta

• 6.

  ¿Qué podemos aprender aquí acerca de la naturaleza del evangelismo?         Mostrar respuesta Si bien hacemos todo lo posible para predicar la palabra de Dios con claridad, nuestro objetivo no es impresionar a los oyentes lo elocuente o lo sabio que somos. Si los oyentes se sienten atraídos por el mensaje debido a la sabiduría del predicador, edificarán su fe en el predicador. Pero el evangelio es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree (Ro 1:16). El poder del evangelio proviene de lo que Cristo ha realizado en la cruz (1 Co 1:18). Ocultar respuesta

• 7.

  ¿Cómo proclamamos el testimonio de Dios sin palabras persuasivas o de sabiduría humana?         Mostrar respuesta Evitar palabras persuasivas o de sabiduría humana no significa abandonar la razón o la coherencia cuando hablamos. En el presente contexto, el punto es dirigir a nuestros oyentes al poder de Dios, en lugar de nuestra elocuencia o sabiduría. El evangelismo debe ser la proclamación de lo que ha logrado Dios, en lugar del alarde de la grandeza del predicador. La salvación de Cristo a través de su crucifixión debe ser siempre el centro de nuestra predicación. Como testigos de Dios, nuestra principal responsabilidad es proclamar la verdad de Dios. Ocultar respuesta

• 8.

  ¿Cómo hacemos para que nuestro discurso o mensaje sea una demostración del Espíritu y de poder?         Mostrar respuesta Como revela la palabra griega para “demostración”, hablar en demostración del Espíritu y de poder significa señalar a otros el Espíritu y el poder de Dios. Cuando testificamos sobre la grandeza de nuestro Dios y lo que Él ha hecho a través de Jesucristo, guiamos a la gente a buscar y a experimentar a Dios. Al hacerlo, también experimentará el Espíritu de Dios y su poder. Como resultado, su fe no descansa en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios (2:5). Ocultar respuesta

• 2:6–16

  9.

  ¿Quiénes son los maduros de los que habla Pablo?         Mostrar respuesta “Los que han alcanzado madurez en la fe” (2:6) son “los que son espirituales” (2:13) y “los que conocen la mente de Cristo” (2:16). Según lo que se enseña en este segmento, estos son creyentes que han recibido el Espíritu de Dios y han sido instruidos por el Espíritu de Dios. Sus valores no son de este mundo sino que están edificados sobre la sabiduría de Dios. Ocultar respuesta

• 10.	¿Cómo revela Dios a los creyentes su sabiduría de salvación?         Mostrar respuesta Dios ha revelado su sabiduría de salvación a los creyentes a través del Espíritu (2:10). Ocultar respuesta

• 11.

  ¿Por qué es necesario recibir el Espíritu de Dios para entender la gracia de la salvación de Dios?         Mostrar respuesta Así como el espíritu del hombre conoce perfectamente las cosas del hombre, del mismo modo, sólo el Espíritu de Dios conoce las cosas profundas de Dios (2:11). Ocultar respuesta

• 12.

  Explique el significado del versículo 15.         Mostrar respuesta La palabra para “juzgar” en este versículo también se usa en el versículo anterior, donde se traduce como “discernir”. Por lo tanto, el juicio del que habla Pablo se trata del discernimiento de las cosas del Espíritu de Dios. Yendo más al contexto, entendemos que las cosas del Espíritu de Dios pertenecen al don de la salvación para los creyentes. En resumen, el mensaje aquí es que aquellos que han recibido el Espíritu de Dios y han sido instruidos por el Espíritu de Dios, entienden la grandeza de la sabiduría de Dios manifestada en su salvación. Por otra parte, el espiritual no es juzgado por nadie. Esto significa que el mundo no lo entiende, porque las cosas que él valora y habla son vistas como locura por el mundo (2:14). Ocultar respuesta

• 13.

  ¿En qué sentido los creyentes tienen la mente de Cristo?         Mostrar respuesta La pregunta “¿Quién conoció la mente del Señor? ¿Quién lo instruirá?” está tomada de Isaías 40:13 en la Septuaginta (traducción griega de la Biblia hebrea). El punto de la pregunta retórica es que Dios es infinitamente más grande que los mortales. Nadie puede enseñarle a Dios conocimiento. Por lo tanto, la frase “la mente del Señor” que Pablo equipara con “la mente de Cristo”, está conectada con la incomparable sabiduría de Dios. Como creyentes, podemos compartir la infinita sabiduría de Dios porque el Espíritu de Dios que hemos recibido nos ha enseñado lo que está en la mente del Señor, es decir, su maravillosa salvación. Ocultar respuesta